Todos sabemos que cuatro décadas de la historia de Rosario están condimentadas por la existencia y rica historia del Observatorio Astronómico Municipal. Podemos encontrar en la historia de la astronomía de la ciudad un primer antecedente en el profesor Victorio Capolongo, quien en marzo de 1941 fundó la Asociación Astronómica, Filosófica y Cultural “Cosmos”, acompañado de un grupo de alumnos aficionados a la astronomía. Veinte años después, en marzo de 1961, existían propuestas formales en la Municipalidad de Rosario para construir un planetario para la ciudad, pero hubo que esperar hasta 1962, que es cuando se concreta la compra del planetario y del telescopio para el Observatorio, llamando a licitación para la construcción de los edificios.
Pero no todo fue tan rápido, como suele ocurrir en nuestro país. El Observatorio Astronómico logró ser inaugurado recién el 18 de junio de 1970, pero el Planetario tuvo que esperar hasta el 19 de junio de 1984 para ver la luz, y tres años más tarde se lograba lanzar el Museo Experimental de Ciencias, primero en su tipo en el país.
De esta forma fue constituyéndose el complejo astronómico y educativo conformado por el Observatorio Astronómico, el Planetario y el Museo Experimental de Ciencias Municipal de Rosario.
Casi cuatro décadas atrás, en aquella inauguración tan importante para la ciudad, el nacimiento del Observatorio Astronómico reunía el aval y la presencia de personalidades muy importantes entonces, como la del doctor José Luis Sérsic, por el Observatorio Astronómico de Córdoba; el doctor Ubaldo Cesco, por el Observatorio Félix Aguilar de San Juan; el reverendo padre Nilo Arriaga, por el Observatorio de Física Cósmica de San Miguel y el profesor Antonio Cornejo, por el Planetario de Buenos Aires, y sumó además la adhesión de numerosos observatorios nacionales y extranjeros.
Los tiempos no fueron fáciles, los hubo hermosos pero también muy difíciles. Por los años ochenta se firmó un convenio entre la Municipalidad de Rosario y el Instituto de Física Rosario (Ifir), dependiente de la Universidad Nacional de Rosario y del Conicet, y se creó la Fundación Planetario, lográndose dar a luz entonces al sueño inconcluso, el del Planetario, dos décadas después de haber llegado el equipo, Carl Zeiss Modelo IV.
El Observatorio Astronómico cumple tareas de divulgación, docencia e investigación en el campo de la astronomía y ciencias afines e informa al público permanentemente de los fenómenos que se producen en el cielo, como eclipses, configuraciones planetarias, pasajes de cometas, etc.
Para tales fines, el Observatorio cuenta con instrumentos de observación constituidos por un telescopio refractor de 150 milímetros de abertura (diámetro de lente objetivo) y 2.250 milímetros de distancia focal, y un telescopio reflector de 300 milímetros de abertura (diámetro del espejo principal) y 4.500 milímetros de distancia focal, ambos construidos por la casa Carl Zeiss de Alemania. Además cuenta con un filtro monocromático de Lyot para la línea H alpha importante para el estudio del sol, y con una cámara CCD ST7.
No solamente se hacen observaciones astronómicas. En el salón Nicolás Copérnico del Observatorio se dictan cursos (algunos ya son un clásico en la ciudad) y conferencias, y se realizan actividades culturales, conjuntamente con la invalorable colaboración de la Asociación de Amigos de la Institución.
Un rica relación con la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) ha permitido que se hayan dictado en sus instalaciones muchas asignaturas de la licenciatura en física, como introducción a la astrofísica e introducción a la astrofísica observacional, y varias asignaturas del doctorado en Física, como astronomía general, astrofísica general, astrofísica I, astrofísica II y astrofísica relativista, además de asignaturas vinculadas con temas de relatividad general, mecánica cuántica y física solar.
También mantiene desde hace veinte años un convenio con el Instituto Politécnico Superior General San Martín de la UNR para el desarrollo de actividades conjuntas en la complementación académica a través de las prácticas observacionales con alumnos del mismo.
Las expectativas astronómicas de la población y de los medios periodísticos en nuestra región quedan ampliamente cubiertas con la actividad desplegada por el complejo. Muchas de las actividades desarrolladas pasaron a tener un alcance importante, hecho que se refleja en el incremento de la cantidad de alumnos de las instituciones educativas que lo visitan, así como también del público asistente en general.
Los cursos y conferencias sobre temas de astronomía atraen sistemáticamente mucho público, principalmente estudiantes secundarios y universitarios. La reciente incorporación a través del grupo de astrofísica del Ifir, de una cámara intensificadora de imágenes digital ha sido muy importante, ya que con esta herramienta se salva el mal cielo de la ciudad, y se pueden registrar eventos astronómicos en tiempo real.
Hay permanentemente pasantes de distintas instituciones educativas, generando interés por la astronomía, el dictado de seminarios y conferencias y la realización de cursos cortos sobre temas astronómicos, óptica y mecánica celeste, dirigidos principalmente a docentes para ampliar sus conocimientos sobre esta ciencia ha sido muy importante.
El personal del Observatorio viene presentando desde hace ya muchos años trabajos científicos y educativos en la Asociación Argentina de Astronomía, y el convenio con el Instituto de Física le ha permitido ser la única institución de origen municipal en ser reconocida profesionalmente por dicha asociación, lo que le permitió ser sede de dos reuniones nacionales, con invitados extranjeros, en los años 1988 y 1999.
La historia del Observatorio a lo largo de estos años ha sido muy extensa, y a pesar de que tecnológicamente ha quedado un poco atrasado, nadie puede negar que se encuentra sumamente instalado en la geografía astronómica tanto nacional como internacional, y ya lleva cuatro décadas de difusión y enseñanza a orillas del Paraná.
*Ex director del Complejo Astronómico Municipal de Rosario (1999-2008); actual subsecretario de Promoción Científica y Tecnológica de Santa Fe.
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