Ciudad

Adaptan una plaza para que todos los pibes puedan jugar

Por Luciana Sosa. Modificaron los juegos para que también puedan usarlos niños no videntes o en sillas de rueda.

La importancia del juego y la recreación en la infancia es una de las temáticas tratadas por el Rotary Club de Rosario. Es por eso que en la plaza que está frente a su sede inauguran hoy a las 10 los juegos adaptados para niños con dificultades motrices, lo cual le da a la plazoleta Corona Martínez el carácter de plaza integradora, en la esquina de San Martín y Saavedra. Esta iniciativa se suma a la que ya existe en el parque Independencia, a metros del ingreso del club Gimnasia y Esgrima.

Rodolfo Motter, presidente del Rotary Club Rosario Sud, señaló a El Ciudadano que la idea surgió tras la visita del grupo de rotarios a la ciudad de Gualeguaychú, en Entre Ríos. Allí vieron cómo sus pares habían adaptado una plazoleta con juegos inclusivos y decidieron replicar junto al apoyo del municipio, sobre todo de la Dirección de Municipal para la Inclusión de Personas con Discapacidad.

La titular de esta, Viviana Marchetti, dijo a este medio que su función fue la de “encargarse de las gestiones internas con el municipio para que la plaza sea entablada como corresponde, que los juegos sean seguros y que la plaza, realmente, sea inclusiva, accesible”.

Trascendió que los nuevos implementos lúdicos, que se adicionarán a los ya existentes en el lugar, serán una hamaca para sillas de ruedas, con pórtico incluido; una calesita para dos sillas de rueda, con asientos para cuatro niños más, y cuatro personas de pie; y, el tercer elemento, un panel sensorial de ta-te-ti, apto para ser utilizado por personas no videntes y/o en silla de ruedas.

“Estos juegos se suman a los ya existentes y su objetivo es no generar una plaza exclusiva de discapacitados motrices, sino que todos, tengan o no dificultades de cualquier tipo, puedan jugar juntos en la plazoleta”, dijo Motter. “Queremos que la integración sea total, en el plano físico y social”, agregó.

“Los fundamentos por los cuales nos decidimos por este emprendimiento fue la importancia de la actividad lúdica en el desarrollo psicológico, físico y social de una persona. También porque estamos convencidos de que nadie es de por sí discapacitado; sabemos que hay personas que tienen ciertos trastornos o déficit, pero los discrimina y los trata de discapacitados su propio entorno, al impedirle el acceso a determinadas actividades de la vida cotidiana, como estudio, trabajo, transporte o esparcimiento. Es una obligación moral de toda la sociedad que ha discriminado ese entorno sólo pensando en la mayoría. Todos tenemos derecho a vivir felices e integrados”, expresó.

El proceso del juego inclusivo

Al tomar contacto con la problemática, Rosario Sud concibió la idea de ofrecer a la niñez un espacio recreativo integrado, inclusivo e igualitario, eliminando cualquier tipo de barrera física o social, para que todos los pequeños de la zona sur puedan guardar entre sus recuerdos el placer de disfrutar de un momento de solaz y esparcimiento.

Para ello comenzó a recaudar fondos a través de diversas actividades de finanzas que permitieron alcanzar la concreción de este anhelo. En respaldo de la propuesta, al interior de su familia rotaria, adhirieron la  Rueda Interna de Rotary Club Rosario Sud (grupo integrado, principalmente, por cónyuges de rotarios) y Rotaract Club Rosario Sud (agrupación compuesta por jóvenes de entre 18 y 30 años de edad).

Pero este proyecto también se extendió a la comunidad y diversas empresas y particulares ofrecieron colaboraciones. Motter agradeció el aporte recibido de empresas privadas para la colocación de estos juegos adaptados. “Los nombres de todos los que colaboraron en este proyecto quedarán impresos en el cartel de la plaza integradora”, aseguró.

En tanto, la Municipalidad de Rosario brindó su apoyo, primero mediante la aprobación del proyecto por parte de la Secretaría de Planeamiento, con el auspicio de la Dirección para la Inclusión de Personas con Discapacidad, y, luego, activamente mediante adaptaciones incorporadas a la plaza, a cargo de la Dirección General de Arquitectura de la Secretaría de Obras Públicas.

Fue así cómo se construyó los accesos para las sillas de ruedas y sendas que conducen a los nuevos juegos, concretó las perforaciones y rellenos de las bases para la instalación de los elementos lúdicos, e incorporó mejoras tendientes a evitar futuras inundaciones en el predio.

Por su parte, el presidente del Rotary hizo un pedido especial a la comunidad: “Espero, de todo corazón, que la ciudadanía cuide esta plaza; aquí no hay vigilancia, pero es necesario de que todos cuidemos esta plaza, que es de todos”.

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