En el Ministerio de Economía no tienen agendado ningún encuentro entre la delegación y el mediador judicial designado por la Justicia de Nueva York, Daniel Pollack, de acuerdo a la agencia Reuters. Sin embargo, las conversaciones siguen adelante. El 30 de julio es la fecha límite para negociar con los fondos buitre y evitar un default.
El juez Thomas Griesa designó a Pollack para negociar a contrarreloj el cumplimiento de un fallo que obliga al país austral a pagar unos u$s 1.330 millones más intereses a bonistas que no ingresaron a dos canjes de deuda tras la masiva cesación de pagos de 2001-2002.
“No hay reunión prevista para el lunes. Sí continúa el diálogo”, dijo a Reuters una fuente del Gobierno, bajo condición de anonimato.
Una orden del juez de distrito bloqueó a fines de junio el pago de un vencimiento de deuda reestructurada hasta que el país compense a los “holdouts”, lo que deja a Argentina al borde de un nuevo default mientras no alcance un acuerdo con esos acreedores antes del 30 de julio.
La delegación de funcionarios enviados a Estados Unidos mantuvo el viernes una breve reunión con Pollack en sus oficinas. No obstante, no se registraron avances y la comitiva regresó al país ese mismo día.
El Gobierno reclama la reposición de una medida cautelar (stay) que le permita cumplir con sus obligaciones mientras negocia con los fondos de cobertura. Es que el Ejecutivo sostiene que no puede ofrecer a los “holdouts” mejores condiciones de pago que aquellas que dio a los bonistas que aceptaron canjear su deuda, bajo el riesgo de violar una cláusula que abriría la posibilidad de reclamos por una suma de hasta u$s 400 mil millones.
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