Una mujer de 30 años fue asesinada a puñaladas por su concubino delante de los dos hijos menores de la pareja. La violenta escena ocurrió alrededor de las 21 de anteayer en bulevar Seguí al 5000, en uno de los ingresos al asentamiento conocido como Vía Honda, en la zona oeste. Allí tuvo lugar una fuerte discusión que terminó cuando el hombre de 32 años sacó de entre sus ropas un arma blanca y le asestó siete puñaladas en el pecho de su mujer para luego fugarse en bicicleta con sus niños de 3 y 6 años, quienes aparecieron horas después en el centro de la ciudad.
“Me asomé porque escuché gritos de auxilio”, dijo una adolescente que vive en uno de los ranchitos que se levantan de los dos lados de las vías férreas que cortan bulevar Seguí a la altura del 5000. La joven relató que alcanzó a ver cómo el agresor forcejeaba con dos criaturas que lloriqueaban y luego se perdió en bicicleta con los niños.
En el suelo quedó tendida Carina Maidana con visibles heridas cortantes en el torso. Los vecinos la sentaron contra una pared y mientras esperaban que llegara la asistencia médica fueron en busca de las hijas mayores de la mujer, que malherida pedía por ellas. Tres adolescentes acudieron al lugar y asistieron a su mamá, que falleció un rato después mientras era operada en el Hospital de Emergencias.
“La ambulancia no llegaba y ella se desmayaba de a ratos, se la veía muy mal”, apuntó otro vecino tras explicar que la mujer fue trasladada al hospital por un móvil policial porque la espera de los médicos fue muy prolongada.
Cuatro puñaladas en el pecho, otras dos en los laterales del torso y una en una mano fueron las heridas que provocaron la muerte de Carina, madre de seis menores. Un vocero policial dedujo que el arma utilizada tendría las características de una navaja ya que los cortes no presentaban desgarros.
Final anunciado
Seis hijos –de entre 3 y 16 años– habían unido por mucho tiempo a la pareja, pero hacía dos meses que se había distanciado, por lo que el hombre vivía con su madre, dijo un vocero. Pero los maltratos físicos eran habituales, de acuerdo con testimonios brindados por la familia de la víctima a los pesquisas. De hecho, un vocero dijo que dos días antes del sangriento episodio la mujer había sido golpeada por el padre de sus hijos. Como prueba de ello la mujer presentaba un corte en la boca, provocado por un golpe de puño, dijo una vecina.
Al parecer, esa pelea tuvo lugar en el sitio donde se cometió el asesinato, a unos 20 metros dentro de la calle que forman las casas levantadas a la vera de las vías.
“Ella pasaba siempre a la misma hora por acá, y a veces él la acompañaba hasta la entrada”, dijo ayer una vecina que prosiguió: “Hace dos días los vi pelear, ella agarró los niños y siguió y después me escondí adentro y no vi más”.
Luego del asesinato de la mujer, que tuvo lugar cerca de las 21, la Policía comenzó una búsqueda intensiva tanto del agresor como de los dos niños que se había llevado con él. Los pequeños, de 3 y 6 años, aparecieron a las 3.30 de ayer abandonados en una esquina céntrica. “Alguien avisó a la Policía sobre las criaturas. Estaban solas en Santa Fe y Corrientes”, dijo un vocero.
Por orden judicial, los niños quedaron a cargo de su abuela paterna, mientras que los otros cuatro están bajo la tutoría de una hermana de Carina.
Al cierre de esta edición, el autor del asesinato, identificado como Alejandro S., era buscado en varios puntos de la ciudad por personal de la comisaría 18ª, con jurisdicción en la zona y la sección Homicidios de la Unidad Regional II.
Voceros del caso informaron que ya se ordenaron allanamientos para dar con el paradero del homicida, que “tiene familiares en villas de emergencias” y no contaría “con recursos para abandonar la ciudad”.
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