Policiales

robo y muerte

Homicida múltiple pidió un abreviado

Tiene 27 años y reconoció ser el autor de cinco crímenes por dinero.


Un múltiple homicida que reconoció haber asesinado a dos hermanos durante un robo cometido en octubre de 2015 en Rosario pidió ser sometido a un juicio abreviado por el doble crimen, por lo que posiblemente sea condenado nuevamente a prisión perpetua.

Se trata de Javier Hernán Pino, de 27 años, quien está acusado de matar a balazos a Agustina y Javier Ponisio, de 28 y 25 años, y ya fue condenado a la pena máxima por el crimen de un playero asesinado meses antes durante un robo cometido en Salta.

Además, el joven fue considerado autor material de otros dos homicidios: el de un comerciante chino asesinado en febrero de 2015 en el barrio porteño de Balvanera y el de una mujer cometido casi dos meses después en un departamento de la zona de Tribunales.

Fuentes judiciales informaron a Télam que los abogados defensores en el caso del doble asesinato de los hermanos Ponisio se presentaron la semana pasada ante el fiscal de la causa, Florentino Malaponte, y solicitaron un juicio abreviado. Y si bien para que lleve a cabo dicho proceso tanto la fiscalía como la querella deben estar de acuerdo, los voceros adelantaron que ambas partes aceptarían el pedido ya que a Pino le imputan el delito de “homicidio criminis causa”, el cual prevé la pena de prisión perpetua.

La identificación de Pino en los cinco asesinatos se logró a principios de 2016 tras el análisis de las vainas encontradas en todas las escenas de los crímenes a través del entrecruzamiento de datos del Sistema Nacional Automatizado de Identificación Balística.

Eso permitió establecer que los proyectiles utilizados en todos los hechos habían sido disparados por la misma pistola que era propiedad de él.

El primer hecho que la División Homicidios de la por entonces unificada Policía Federal Argentina (PFA) comenzó a investigar, a pedido del fiscal de Instrucción Justo Rovira, fue el crimen de Ni Qi Fu, un comerciante chino de 40 años asesinado el 16 de febrero de 2015 en el barrio porteño de Balvanera.

En este hecho, la víctima recibió cinco balazos en el tórax y dos en el antebrazo izquierdo, al tiempo que en la escena del crimen se secuestraron tres vainas servidas calibre 9 milímetros, dos plomos deformados y un proyectil intacto.

Luego, el 15 de abril de 2015, se halló el cadáver de Claudia Sosa, de 32, en el interior de su departamento de Tucumán 1545, en la zona de Tribunales y frente a la comisaría 3º. La mujer, que daba masajes con electrodos en su domicilio, presentaba un disparo en la nuca y del lugar se secuestró una vaina calibre 9 milímetros y se determinó el faltante de una computadora.

Más tarde se estableció que había correspondencia entre las vainas halladas tras el homicidio del comerciante chino y el de Sosa, es decir que la misma arma había sido utilizada en ambos hechos.

Poco después los investigadores obtuvieron la información de que esas vainas tenían relacionados con el doble homicidio cometido en Rosario y con  otro asesinato en Salta.

El 13 de julio de 2015 fue asesinado de un tiro en la cabeza, por arriba de la oreja izquierda, el playero Daniel Ríos, de 28 añs, quien trabajaba en una estación de servicio de la localidad salteña de El Galpón, donde le robaron unos 70.000 pesos de la recaudación.

Mientras que el 16 de octubre del mismo año fueron hallados los cadáveres de los hermanos Ponisio en su departamento situado en el barrio Roque Sáenz Peña de Rosario.

De acuerdo a los pesquisas, la mujer tenía un disparo en la cabeza, cerca de la oreja derecha, y el muchacho cuatro impactos en el cráneo, tórax, un brazo y cintura; en tanto que del lugar se secuestraron cuatro vainas para su posterior cotejo balístico.

Pino fue detenido pocos días después de este doble crimen en la provincia de Santiago del Estero y declaró ante la Policía: “Le robé 25 mil pesos al pibe y lo maté. Después me encargué de la piba”. Y en mayo de este año, un tribunal de la localidad salteña de Metán lo condenó a prisión perpetua por el crimen del playero Ríos.