Ciudad

Aterrizaje forzoso

Ya son tres las aerolíneas low cost que dejan de volar desde Rosario

La aerolínea Avianca, de capitales colombianos y vinculada con la familia Macri, anunció que dejará su operación en Argentina. No pudieron con la baja en la demanda insuflada por la crisis cambiaria


Este martes la aerolínea Avianca anunció que dejará de volar en Argentina en tres días. No hará más vuelos en el modelo impulsado por Cambiemos de low cost desde Reconquista, Buenos Aires y Rosario. Es la tercera firma de este tipo que descontinuó sus vuelos en la ciudad. Algunas se mantuvieron con los viajes de cabotaje en Argentina, pero según las estadísticas del Aeropuerto Internacional de Rosario (AIR), no pudieron con la baja en la demanda y cancelaron las conexiones al exterior. Entre noviembre 2017 y 2018 bajó un 10 por ciento la cantidad de pasajeros que subían o bajaban valijas en la aeroestación de Fisherton. “De no remontar los viajes internacionales en los meses de verano y, dado que los vuelos de cabotaje son menos frecuentes en los meses de calor, es previsible que la actividad siga disminuyendo”, señalaron desde la Fundación Banco Municipal de Rosario, donde aún no terminaron de procesar los datos de este temporada.

Corta

En pocas y cuidadosas palabras la firma Avianca publicó este martes un comunicado donde avisó que “descontinuará” los vuelos de Argentina. Quienes tenían que viajar en las próximas semanas desde Reconquista, Buenos Aires y Rosario deben contactarse con la firma para usar otras compañías o pedir el reembolso. El call center de Avianca puede hallarse llamando al 0810-333-8222. Quienes compraron los boletos en agencias de viajes deberán reclamar por esa vía el reembolso.

La firma de capitales colombianos acusó recibo de las políticas macroeconómicas del sur de América, donde cada vez hay más aerolíneas low cost alentados por los gobierno nacionales. También creció el valor del combustible y la devaluación de las monedas de Brasil y Argentina hizo que bajara la demanda.

Según un informe del Banco Municipal de Rosario, la venta de pasajes en la ciudad cayó un 10 por ciento entre noviembre de 2017 y el mismo mes de 2018. “La brecha negativa, que se acentúa en los últimos meses se explica por el menor movimiento de personas en vuelos internacionales, con una tasa de crecimiento de cabotaje apenas perceptible que no compensa la disminución en el movimiento internacional de pasajeros. El 2018 termina con un volumen de pasajeros mensual más cercano a los primeros meses del año pasado y muy alejado del movimiento récord alcanzado en enero de 2018”, sostuvieron desde la entidad bancaria encargada de generar estadísticas a partir de los datos de la aeroestación, entre otros sectores productivos de la ciudad. A diferencia de Rosario, los aeropuertos de Córdoba y Mendoza registraron incrementos en el total de pasajeros en 5,2 y 17,8 por ciento, respectivamente.

“De cumplirse las expectativas para 2019 –con un dólar caro y una economía en recesión durante el primer semestre que comienza a recuperarse sobre la segunda parte del año– en el Aeropuerto de Rosario deberían trabajar en mejorar los vuelos de cabotaje. Pueden hacerlo a través de la llegada de nuevas empresas y el establecimiento de más rutas aéreas internas y en darle mayor dinamismo al sector turístico local por fuera del aeropuerto para atraer más viajeros internacionales”, completaron los analistas del banco.

La vencida

A principio de enero Azul Líneas Aéreas confirmó que en abril dejará de operar la ruta desde Rosario a Porto Alegre que había sido inaugurada en julio. Mantiene hasta ese mes tres frecuencias semanales: martes, jueves y sábado. Desde la firma habían explicado que necesitan los aviones para cubrir vuelos internos en Brasil. De no modificarse la decisión, mantendrán el vuelo semanal de los sábados a Recife en el nordeste del vecino país. “Si existe una mejora en la economía de Argentina y Brasil podremos retomar los vuelos desde la capital gaucha”, explicaron desde la firma al portal www.aviacionline.com.

La pionera

En agosto pasado la primera low cost en llegar a Rosario, la chilena Sky Airline, se bajó de las operaciones desde el aeropuerto. No duró un año y tuvo que suspender los tres vuelos semanales al país trasandino. A mitad de año había bajado de tres a dos vuelos por semana. El sueño santafesino de volver de Santiago cargado de compras no llenó los aviones por la crisis cambiaria. Tampoco resultó la idea de que Chile usara a Rosario como puerta de entrada al país. Al igual que las demás compañías low cost el discurso empresarial de Sky fue: “Si mejora la demanda de pasajes y cierra en lo económico, podemos retomar la ruta”.

Comentarios