Mundo

Wikileaks: Assange toma precauciones porque teme por su vida

Cercado por la Justicia, el fundador de Wikileaks mantuvo una entrevista online con lectores de un diario británico. Dijo que se enfrenta a un "súper poder" y que el gobierno de su país asiste a Estados Unidos en los ataques hacia su persona. “Hola Cristina, habla Hillary”

Buscado por la Justicia luego del estallido del “Wikiescándalo”, tras dar a conocer 250 mil documentos diplomáticos del gobierno de EEUU, Jules Assange respondió preguntas a lectores del sitio Web del diario británico “The Guardian”.

El joven australiano nacido en Townsville en julio de 1971, que estudió matemática y física en la Universidad de Melbourne y retratado por quienes lo conocieron como “extremadamente inteligente, determinado y por momentos paranoico” dejó en claro que el regreso a su país es “imposible” debido a que el se está asistiendo al gobierno de EEUU en los ataques hacia su persona y su equipo”.

El sitio Web se encontraba fuera de servicio a la hora en la que Assange estaba citado para conectarse con los lectores. El cartel que rezaba “Estamos temporalmente fuera de servicio” hizo pensar en una maniobra para evitar el encuentro virtual, que finalmente tuvo lugar una hora más tarde que lo anunciado.

Consultado sobre posibles represalias a los informantes de WikiLeaks, Assange aseguró que “durante los últimos cuatro años hemos estado publicando informes, y no ha habido ninguna acusación creíble -ni siquiera del Pentágono- que indiquen que alguna persona haya sufrido represalias como resultado de nuestras actividades. No esperamos que eso cambie”. Agregó que si el joven militar Bradley Manning está detrás del envió de los documentos clasificados sin ninguna duda es un héroe.

Se refirió también a las amenazas que se ciernan sobre su persona: “Las amenazas contra nuestras vidas son de público conocimiento y estamos tomando las precauciones apropiadas en la medida en que podemos, ya que nos enfrentamos a un súper poder”, aclaró.

Cuando un internauta le preguntó cómo se sentía luego de que Tom Flanagan, asesor del primer ministro canadiense, Stephen Harper, afirmó que “Assange debería ser asesinado”, el interesado se limitó a contestar que “si es cierto que el señor Flagan y otros están haciendo estas declaraciones en serio, entonces deberían ser incriminados por incitación al asesinato”.

La conversación dio lugar también para que el creador de WikiLeaks revele un dato interesante: entre el material aún sin publicar existen cables referidos a OVNIS.

Comentarios