“Signal fue seleccionada como la aplicación para la mensajería instantánea”, es el mensaje distribuido entre los empleados de la Comisión Europea que, aunque sin mencionar a WhatsApp, desaconsejan el uso de la plataforma de Facebook por considerarlo inseguro. No es el primer organismo multilateral es despegarse: hace algunas semanas, luego de los informes sobre un ataque al celular personal del CEO de Amazon Jeff Bezos en el que WhatsApp fue la puerta de acceso, la Organización de las Naciones Unidas también ordenó a sus funcionarios eludir las comunicaciones a través de esa red.
Los alejamientos de la plataforma que Mark Zuckerberg compró en 2014 a Brian Acton y Jan Koum por 19 mil millones de dólares se suceden. El diario británico The Guardian publicó en diciembre pasado que el Partido Conservador del Reino Unido pidió a sus parlamentarios que eviten el uso de WhatsApp y se pasen a Signal.
Ahora se pasan a Signal, mensajero lanzado oficialmente a mediados, precisamente, de 2014, aunque estaba operativo desde el año anterior. Su caballito de batalla fue de entrada la seguridad y la privacidad, aunque no se transformó en una competencia relevante de WhatsApp. Hasta el momento. Pero ya inició una campaña agresiva para captar usuarios.
Signal cuenta con su relanzamiento con la ayuda financiera y técnica de Acton, uno de los cofundadores de WhatsApp que se había incorporado a la mega compañía de Zuckerberg, pero que se desvinculó de la misma descontento con las políticas de la empresa.
Aplicación en la mira
Los cuestionamientos a WhatsApp se suman. El sitio Politico informó que la recomendación de la Comisión Europea se encuadra en una serie de medidas para reforzar la ciberseguridad después de incidentes en ese sentido que perjudicaron a diplomáticos y personalidades de alto perfil en el organismo continental.
Hay numerosos antecedentes de la mensajería con el logo del teléfono como portal de acceso para hackeos. Entre ellos el que afectó a la embajada de la Unión Europea en Moscú a mediados de 2018 y la intromisión durante tres años a la red de comunicaciones diplomáticas de la Unión Europea, revelado ese año por The New York Times.
“Es un caballo de Troya”, le disparó a WhatssApp, a fines de 2019, Pavel Durov, creador y director de la plataforma Telegram, competidora de Instagram, precisamente también de Facebook.
El informe indica de la Comisión Europea no utilizará Signal –como tampoco lo hacía con WhatsApp– para todas sus comunicaciones, sino para las que se mantengan en forma externa entre el personal. La información confidencial no clasificada seguirá circulando por correos electrónicos encriptados. Los documentos clasificados, por otros medios con seguridad extrema.
Libre, abierto, gratuito
La ascendente Signal una aplicación de mensajería multiplataforma y de código abierto disponible para teléfonos móviles para los sistemas operativos Android e iOS (que usan los aparatos de Apple), que permite la comunicación en forma encriptada de extremo a extremo, como WhatsApp. Tiene también soporte para PC con sistemas operativos Windows, macOS y versiones de Linux basadas en Debian.
Signal es un desarrollo de la organización Open Whisper Systems y se lanza bajo la licencia GPL v3 como software gratuito y de código abierto.
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