Lisandro Olearo
Enmarcado en una actividad de legado del Mundial Juvenil, hoy a las 16 en la cancha de césped sintético del Hipódromo jugarán un amistoso los Gladiadores con Rosario Classic. Será el segundo partido para el equipo integrado por internos, tras cuatro años de trabajo.
Gladiadores es un equipo de rugby integrado por internos y ex internos del Servicio Penitenciario de la Provincia de Santa Fe, que forman parte del proyecto “Una nueva oportunidad” que impulsa la Fundación Tercer Tiempo llamado. Tras la excelente experiencia vivida en diciembre pasado con el partido ante Old Resian, se repite el partido de rugby por la inclusión.
Se prevé que se haga presente la intendenta Mónica Fein, y podría también hacerse presentes autoridades del Gobierno provincial.
El plantel de Rosario Classic es el siguiente: Juan Toti Spineli (Pilar), Faggiolani (medio scrum), José Maio (3ª linea) (Provincial); 4 David Dinolfo (Pilar) y Polichela (forward) (Old Resian); Castillo (2ª Línea), Rafael De Luise (apertura), Eduardo Galán (centro) y Joaquín Pascual (wing) (Jockey Club); Ramiro Curto (3ª línea), José Luis Parra (wing), Fabricini (pilar), Pablo Gelai (wing) y Guido De Luise (3ª línea) (Logaritmo); Fernando Basetti (fullback) y Santiago Ascencio (centro) (Los Caranchos); Sacha Corolenco (hooker) y César Reyes (wing) (Universitario); Román Tosto, Germán Tosto (octavo) y Sebastián Bosch (3ª línea) (GER).
Fundación Tercer Tiempo
La Fundación Tercer Tiempo, Rugby para la Reinserción, trabaja en poblaciones carcelarias, institutos de menores, escuelas, clubes y organizaciones sociales. A través del deporte transmite valores afianzados en la solidaridad, la disciplina, el sacrificio y el respeto. El objetivo es lograr una adecuada reinserción social de los adolescentes, jóvenes y adultos que se encuentren en situación de vulnerabilidad social o en conflictividad con la ley penal.
El trabajo de la Fundación no termina cuando el interno recupera su libertad, ahí inicia el programa “Nueva oportunidad”, en donde los ex internos siguen practicando rugby, pero además tienen la oportunidad de aprender un oficio, tienen contención y pueden hacer una buena reinserción en la sociedad después de haber cumplido su condena.
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