La automotriz Volkswagen anunció ayer el despido de 30 mil trabajadores en todo el mundo, de los cuales 7 mil serán en la Argentina y Brasil, lo cual agravará aún más la crítica situación que enfrenta el sector en el país por la recesión.
En la Argentina, Volkswagen cuenta con 6.000 trabajadores en las dos plantas industriales en General Pacheco (provincia de Buenos Aires) y en la ciudad de Córdoba.
En la planta de Pacheco VW produce la pick-up Amarok que se exporta a más de sesenta países y el Suran como vehículo de pasajeros; mientras que en la fábrica de Córdoba se producen cajas de transmisión (los modelos MQ 200 y MQ 250) de las que exporta el 90% a numerosos destinos en el mundo.
La marca alemana tiene una fuerte presencia en la preferencia de los argentinos ya que hace 13 años consecutivos que lidera las ventas y su modelo más vendido es el Volkswagen Gol Trend.
Al igual que las demás terminales automotrices radicadas en el país, la compañía alemana tuvo que adelantar vacaciones y suspender personal para enfrentar el estancamiento que tiene la industria y particularmente el rubro automotriz. En lo que va del año, la producción automotriz experimenta una caída cercana al 15 por ciento, según la información mensual que provee la cámara Adefa.
Recorte mundial
En medio de este contexto preocupante, la firma alemana anunció la puesta en marcha de un plan de recorte de gastos por unos 3.900 millones de dólares hasta 2020, para compensar las pérdidas producidas por el “dieselgate”, una maniobra para disimular digitalmente las emisiones contaminantes de sus vehículos.
Según informó la empresa, las dos terceras partes de los recortes (unos 23.000 empleos) se harán en Alemania y el resto en Latinoamérica, especialmente en dos mercados actualmente en dificultades: Argentina y Brasil. Las desvinculaciones se harán bajo la modalidad de jubilaciones anticipadas, indicó la firma que emplea a casi 600 mil personas en todo el mundo y controla unas 12 marcas.
Pérdida de empleos
Al respecto, el secretario general del Smata, Ricardo Pignanelli, venía advirtiendo sobre pérdidas de empleo si se mantiene la actual política económica: “Si no protegemos la industria vamos a perder puestos de trabajo”. “No sé después de fin de año, si esto no se revierte, hasta cuándo vamos a sostener el licenciamiento”, indicó.
“Lo que más preocupa es que está cayendo la fabricación de autos, no la venta, y para fin de año vamos a vender 650 mil autos, pero vamos a fabricar, con mucha suerte, 450 mil”, agregó el titular de Smata.
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