Un camión cargado de carne volcó pasado el mediodía de este martes en la zona de El Mangrullo, en avenida Nuestra Señora del Rosario y Belgrano, uno de los accesos sur de la ciudad. La compuerta trasera del utilitario quedó destruida, dejando al descubierto más de 6 mil kilos de media reses. Personal policial acordonó el sector del siniestro, en un intento de impedir que vecinos, movidos por la necesidad, se hicieran de los cortes. La demora en la resolución sobre el destino de la mercadería derivó en una breve batalla campal: un grupo reducido de personas comenzó a arrojar piedras a los efectivos, que respondieron con disparos antitumulto.
El conflicto llegó a un término cuando un camión llegó en auxilio de la carga, cuyo destino era el frigorífico Swift de Villa Gobernador Gálvez, luego de casi dos horas de espera y expectativa. En el momento más tenso entre la Policía y vecinos, la cronista de Telefé Rosario Evelyn Arach fue alcanzada por dos piedrazos –en una pierna y en la cabeza– mientras hacía la cobertura del caso. Las lesiones no fueron de gravedad.
Alrededor de las 13, conocida la noticia por el boca a boca y los noticieros, vecinos de barrio El Mangrullo y Saladillo comenzaron a agolparse bajo la lluvia y en torno del utilitario, que quedó destrozado en la banquina oeste de la colectora de Circunvalación. Un pelotón de la Policía de Acción Táctica (PAT) no tardó en llegar para impedir que la gente se llevara el botín cárnico, parte de él volcado sobre la banquina. “Nosotros no podemos decidir si la gente puede llevarse la carne, lo decidirá Bromatología”, dijo un efectivo del grupo táctico.
Posible intento de robo
El camionero, un joven que provenía desde Carcarañá, dijo que terminó volcando debido a un posible intento de robo. Según explicó, un auto lo encerró y por eso aceleró la marcha, por lo que perdió el control del utilitario.
La posibilidad de llevarse un trozo de carne atrajo a cada vez más vecinos, al tiempo que a las 14, pasada una hora del siniestro, las autoridades y el propietario del camión no habían aportado una solución al conflicto en un marco de necesidad alimentaria.
Pasadas las 15, luego de piedrazos y escopetazos y la presencia de decenas de patrulleros, otro camión llegó con personal que cargó las media reses para llevarlas al Swift.
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