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Sociedad

Ursula Le Guin: ciencia ficción como una metáfora de la vida

Una escritora de este tiempo que deja traslucir sus claras definiciones ideológicas: feminista, anarquista, taoísta.


La ficción y la literatura fantástica son herramientas útiles para la difusión de ideas sobre la sociedad, sobre todo cuando se tiene una perspectiva crítica que impugna los injustos ordenamientos establecidos. Ejemplo de ello son los escritos Utopía, de Thomas Moro, y los de Jonathan Swift narrando los viajes de Gulliver y señalando con sarcasmo las desigualdades y miserias del mundo.

La escritora Ursula Kroeber Le Guin, nacida el 21 de octubre de 1929 en Berkeley (California), Estados Unidos de Norteamérica, se ubica en esa línea. Sus novelas y cuentos dejan traslucir sus claras definiciones ideológicas: feminista, anarquista, taoísta.

U. K. Le Guin es una magnífica narradora de textos de fantaciencia pero también una atenta observadora de los acontecimientos del turbulento mundo contemporáneo. Desde su residencia ubicada en Portland, Oregón, no deja de señalar la barbarie de las guerras, como las impulsadas por el Estado norteamericano en Afganistán e Irak.

Albores de una vida

Ursula Kroeber Le Guin es hija del reconocido antropólogo Alfred Kroeber. Éste y su madre, la escritora Theodora Kroeber, la pusieron desde su infancia en contacto con innumerables libros a través de los cuales tomó conocimiento los mitos y leyendas de los más diversos pueblos del planeta. No resulta entonces extraño que la pequeña Ursula escribiera su primer relato a los 11 años, enviándolo a la revista Astounding Science Ficction. No fue publicado, pero este tropiezo no la hizo desistir de continuar ejerciendo su vocación por hacer literatura.

U. K Le Guin estudió en la escuela Radcliffe de la Universidad de Harvard. Allí culminó sus estudios graduándose en 1951. En la Universidad de Columbia hizo un posgrado en lenguas romances y éste fue su tema de tesis de maestría. Su escrito aborda la cuestión de las lenguas romances en sus distintos matices durante la Edad Media y el Renacimiento.

En 1953 Ursula obtuvo la beca Fulbright y partió a Francia para continuar allí sus estudios. En este país conoció a Charles Le Guin, su compañero de vida desde entonces.

Las publicaciones iniciales

En 1962, en la revista Amazing, U. K. Le Guin vio publicado su primer cuento fantástico. Su iniciación como novelista fue en 1966 con El mundo de Rocannon, libro que esboza el universo de las criaturas de Le Guin, que se desplegará con mayor intensidad en las diversas sagas de su literatura.

La creación del universo Hainish o Ekumen, en el que cohabitan diversos grupos de humanoides descendientes de civilizaciones ancestrales, le permite realizar análisis psicológicos y sociológicos relevando y revelando una gran variedad de facetas y axiomas de las culturas existentes en las sociedades contemporáneas.

A su retorno de Europa Ursula K. Le Guin publicó al menos veinte novelas, cuatro colecciones de ensayos y una multiplicidad de libros orientados hacia los niños y jóvenes. También realizó traducciones: del español un poemario de Gabriela Mistral y del chino el Tao Te King (El sendero de la virtud), atribuido a Lao Tsé.

El ciclo de Terramar

La siguiente etapa de U. K. Le Guin comienza en 1968 con la novela Un mago de Terramar, continuando con Las tumbas de Atán y La costa más lejana.

La metáfora que se despliega en este ciclo es presentada en el primer volumen, donde un joven mago se encuentra enfrentado a su propia sombra, lo que significa nuestra lucha permanente con nuestro propio inconsciente, siempre tan esquivo y enigmático.

Dos décadas después de Un mago de Terramar, Le Guin retoma este tópico con libros como Tehanu (1990), continuando con El otro viento (2001), Las doce moradas del viento y Cuentos de Terramar.

Ficción y antropología

Los libros de U. K. Le Guin son una permanente indagación intercultural con perspectiva sociológica y antropológica. En sus relatos es perceptible el ejercicio de análisis comparativos de diversas culturas que trasuntan una clara actitud antidogmática, alejada de cualquier etnocentrismo.

Podemos señalar en este sentido La mano izquierda de la oscuridad (1969), donde ventila y desmonta tabúes sobre la identidades sexuales. También merece mencionarse

El nombre del mundo es bosque (1972), donde toma clara posición contra el Estado norteamericano y su invasión y guerra en Vietnam.

No coincidimos con los que acusan a U. K. Le Guin de hacer ciencia ficción blanda contraponiéndola a obras de carácter más “materialista”. Consideramos que Ursula Kroeber ha decidido tomar otros caminos, no menos críticos de la realidad imperante en este mundo y comprometidos con la búsqueda de sistemas sociales no opresivos.

Breve racconto

En el ciclo de Ekumen se incluyen los títulos Planeta de exilio (1966), La ciudad de las ilusiones (1967), Los desposeídos: una utopía ambigua (1974), Un pescador del mar interior (1994) y El relato (2000).

La trilogía “Anales de la costa occidental” está conformada por Los dones (2004), Voces (2006) y Poderes (2008).

Con su prosa prolífica, y desde una amplia perspectiva humanista en un mundo con tendencia a la deshumanización y cosificación alienante, Ursula Kroeber Le Guin abrió nuevos senderos para la ficción, y las ideas e iniciativas emancipativas, en vida aún, firme desde sus 84 fructíferos años, continúan alertando sobre las acechanzas y peligros que implican quienes ejercen el poder global en el mundo y los sistemas que los sostienen.

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