Ezequiel Nieva
Un tercio de los trabajadores municipales de la ciudad de Santa Fe se encuentran precarizados, según estimó este lunes Juan José Saleme, primer candidato a concejal de Juntos (PJ), quien definió la situación como “una bola de nieve que va a heredar quien gobierne la ciudad”.
De acuerdo a los datos del ex concejal y postulante del PJ, entre 1400 y 1500 de los 5000 trabajadores de la Municipalidad de Santa Fe está en situación precaria bajo la figura de “practicantes”: casi el 30% de la planta total. A ese número se suman los 180 funcionarios políticos de la gestión y otros 700 trabajadores contratados que los asisten.
“Nosotros entendemos que hay trabajo en negro, que se los ha precarizado porque ya llevan, en algunos casos, doce años practicando. En los años electorales, además, se los aprieta y se los obliga a militar. Se les mete miedo diciéndoles que si ganan los otros se van a quedar sin trabajo, nos contaron muchos practicantes”, sostuvo el ex concejal en declaraciones a Aire de Santa Fe.
La figura del practicante fue pensada como una transición pero se convirtió en una herramienta que perduró en el tiempo. Surgió en el marco de un programa de entrenamiento laboral creado por ordenanza del Concejo Municipal de Santa Fe en marzo de 2008, cuando comenzaba la gestión del intendente Mario Barletta. Su sucesor, José Corral, lo mantuvo durante sus dos mandatos.
El Programa de Entrenamiento y Capacitación Laboral tenía como meta generar una alternativa para una primera experiencia laboral. Se establecía un período de práctica de seis meses en distintas áreas del municipio, que podía renovarse hasta por dos años. Saleme recordó que “era como un programa social de primer empleo y se pagaba una ayuda económica, según la ordenanza”.
Cuando se vencieron los dos años, en 2010, el Concejo extendió el programa por dos años más. Cuando se cumplió ese plazo, en 2012 (ya con Corral como intendente), se modificó la ordenanza para que las prácticas se pudieran renovar sin límites.
Los practicantes no cobran un sueldo formal, sino que reciben una ayuda económica mientras desarrollan la práctica laboral. En algunos casos, la situación se mantiene por años. El sindicato de los municipales de Santa Fe, Asoem, había alertado que “cientos de trabajadores” se encuentran precarizados desde la primera gestión del radicalismo (2007). “En esa época el Concejo, como decíamos nosotros, era una escribanía del ejecutivo”, recordó Saleme.
El Programa de Entrenamiento y Capacitación Laboral tiene por objeto “profundizar las políticas de empleo y formación profesional promovidas por el gobierno de la ciudad, apuntando a mejores herramientas que potencien la empleabilidad y permitan la inserción en el mundo del trabajo a personas desocupadas y en situación de vulnerabilidad social”.
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