José Odisio
Frank Kudelka está con un pie fuera del Parque. Al menos esa es la sensación que quedó tras la derrota ante Independiente. Y si no fuera por la reacción mostrada por el equipo en el segundo tiempo, como sucedió también ante Talleres, tal vez el propio entrenador hubiera presentado su renuncia posterior al partido y no habrá un tiempo de charlas y negociaciones con las dirigencia para definir su continuidad o no.
“No tengo nada para decirles, no manejo la premura de decir cosas que ustedes quieren escuchar. No hablé con los directivos, entiendo la premura de ustedes pero si no encuentran la respuesta (sobre su continuidad) pido respeto y que no sigan preguntando por lo mismo. Será lo que tenga que ser. Hay que ponerse en el lugar de la persona y respetar el momento”, respondió con cierto fastidio el DT en la conferencia post partido, cuando la prensa le consultaba sobre su continuidad.
“Con el trabajo a destajo durante la semana no nos alcanza. Tengo en claro que el único resorte que hay es el técnico y no los jugadores, pero hace un ratito que terminó el partido, y si no tienen otra pregunta distinta, les pido que me entiendan. No voy a hacer una parodia. Será lo que tenga que ser, pero agradezco entiendan mi respuesta”, agregó, sin dar una respuesta clara sobre su idea de seguir o no.
Hubo alguna charla con la dirigencia, pero la situación aún no está resuelta. Y si bien las partes prefirieron mantener en hermetismo las conversaciones posteriores al partido, todo hace suponer que el ciclo de Kudelka está cerca de su fin.
Newell’s apenas acumuló un punto de doce en este inicio de la Copa de la Liga, lo que lo deja complicado de cara a aspirar una clasificación a pelear por el título. Pero esta mala racha, que ya lleva seis partidos sin victoria, se acrecienta en el fastidio y desaprobación de los hinchas luego del pobre desempeño en la Copa Maradona.
Y los hinchas no son los únicos disconformes. La dirigencia y Sebastián Peratta tampoco están a gusto con los resultados, mucho más si se tiene en cuenta el plantel con el que cuenta Kudelka. El año pasado llegaron Nacho Scocco, Pablo Pérez y Sebastián Palacios (luego se fue), se renovó con Santiago Gentiletti y Mariano Bíttolo (hoy ambos están lesionados). La otra apuesta, aprobada por el DT no funcionó: Manuel Guanini. Y para este torneo llegó Cristian Lema, uno que parecía imposible de traer, además de Jonatan Cristaldo, Yonatan Cabral, Franco Escobar (lesionado), Franco Negri, Fernando Belluschi y Justo Giani.
Newell’s tiene un plantel para aspirar a pelear arriba. Pero Kudelka parece haber entrado en un laberinto de confusión táctica que provoca un bajón en el rendimiento general de los jugadores. Y hay un punto más que cuestionable: la preparación física.
La Lepra es un equipo que no parece bien entrenado. Y la excusa de Kudelka sobre este tema siempre se orienta a tener un plantel con jugadores veteranos. Pero tampoco corren los jóvenes, incluso algunos como Jerónimo Cacciabue o Julián Fernández parecen haber involucionado.
No hay dudas que cualquier otro entrenador difícilmente hubiera resistido el fracaso de la Copa Maradona. Pero Kudelka venía de salvar a Newell’s del descenso, con un trabajo más que los propios hinchas elogiaban, y eso generó que haya un poco más de paciencia de la dirigencia. Apoyado por el respaldo que se ve del plantel, aunque desde el juego no siempre parezca real.
¿Por qué se prolonga la salida? Kudelka no está tan convencido de irse, y con un contrato que vence a fin de año, echarlo supone un costo económico que necesita de charlas para llegar a un acuerdo.
Y por otro lado, si bien la dirigencia y Peratta tienen nombres en carpeta, ninguno de esos entrenadores disponibles generan una aceptación inmediata en la gente, más allá de la capacidad de trabajo que pudieran tener. Y con las elecciones a corto plazo, elegir un nombre implica buscar un DT que caiga bien en la gente, y que obtenga resultados rápido, en especial porque en 50 días Newell’s empezará a jugar la Copa Sudamericana.
La danza de nombres incluye a muchos entrenadores, aunque desde la dirigencia nadie confirmó si está definido que se vaya Kudelka. Germán Burgos es uno de ellos. El Mono está esperando desde hace un tiempo una oportunidad para empezar a dirigir tras estar más de 10 años al lado del Cholo Simeone. Tiene personalidad, es un nombre que puede generar empatía en los hinchas y hay buenas referencias de sus capacidades, aunque no deja de ser una apuesta.
Otros nombres que surgieron, por el gusto de Peratta o los directivos son Mariano Soso y Juan Pablo Vojvoda, aunque ninguno de los dos genera una inmediata aceptación en los hinchas.
Un nombre que está desde hace tiempo en la carpeta de la dirigencia es Mario Sciaqua, incluso fue sondeado antes de que venga Kudelka. Sciaqua está actualmente en Sarmiento y hay que ver si hay una chance de tentarlo.
Y en las últimas horas apareció otro nombre: Bruno Marioni. El ex DT de Pumas de México está disponible y su pasado en Newell’s le permitiría estar en carrera, al igual que Rolando Schiavi, quien dejó la reserva de Boca y para muchos tiene la personalidad para encaminar a este equipo.
Lo cierto es que por estas horas se define la suerte de Kudelka. Y todo indica que el ciclo está cerca del final. Aunque la proximidad del cotejo ante Defensa y Justicia obliga a tomar una decisión que no debería pasar de hoy. Y tal vez esa premura le dé un partido más a Kudelka, aunque no parece que eso suceda.
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