Un niño, el guardián de la memoria de los héroes de Malvinas

“Tu hija no me quiere llevar nunca a limpiar las placas de los ex combatientes en el Monumento a los Caídos en Malvinas”, le dijo Ignacio Elías a su abuelo Miguel hace unos años atrás. Hablaba de su madre. El abuelo decidió tomar cartas en el asunto y desde hace dos años van juntos cada domingo a pulir los nombres de quienes cayeron en combate. Ignacio o Nacho, como le dicen, tiene 9 años y este domingo fue reconocido por el Concejo Municipal con un diploma de honor por ser el guardián más chico y cuidar la historia del conflicto en las islas. Los ex combatientes lo esperaron con una sorpresa más: le regalaron una camiseta de Newell’s Old Boys firmada por los jugadores del equipos del parque Independencia.

Nacho vive con sus padres y una hermanita que tiene 5 años y se llama Guadalupe. Su padre trabaja en el bar de una librería y su mamá es maestra jardinera. Siempre fueron una familia interesada por los problemas sociales. La guerra de Malvinas marcó a Nacho, que todavía no entiende por qué tantos chicos fueron a una guerra. “Un día vine con mi mamá y las placas con los nombres de los ex combatientes estaban todas sucias. Quise venir a limpiarlas. Estoy re feliz y emocionado por la distinción que me dieron”, contó a el chico, de personalidad arrolladora a El Ciudadano.

Nacho explicó que se interesó en Malvinas a los cuatro años cuando su maestra de jardín les habló de la guerra. Desde ese momento, en que conoció la historia del enfrentamiento de Argentina y el Reino Unido por la soberanía de las islas, sigue investigando. En paralelo, su programa de domingo es el mismo: de 10 a 12 su abuelo lo lleva a lustrar las placas con los nombres de los soldados caídos frente al Monumento a la Bandera. “Traemos toallas y productos de limpieza. Tiene que ser de la marca Blem. Probamos con otros y queda todo manchado. Ahora tengo la mano entrenada y tardo menos en limpiar”, detalló el chiquito. “Este es un lugar sagrado. Hay nombres de soldados que lucharon por nuestra patria y por eso lo cuido”, sumó.

Entre Nachos

Nacho está en cuarto grado. Va a la escuela Albert Sabin de barrio Triángulo. Sus compañeros, a modo de broma, le dicen que comparta un poco de fama. “Me llevo muy bien con todos”, dijo con una sonrisa pícara. Mientras daba notas para distintos medios de comunicación en el Cenotafio a los Caídos en Malvinas –obra inaugurada en junio de 2005– los ex combatientes lo sorprendieron y le regalaron la camiseta de Newell´s. Estaba firmada por el plantel rojinegro. “Fui una sola vez a la cancha. Mi jugador preferido es Ignacio Scocco porque en todos los partidos puso ganas y fue un buen goleador. Es mi ídolo”, aclaró el chiquito y deslizó que cuando sea grande quiere ser jugador de fútbol y sacar campeón a Newell´s.

Ignacio contó que cuando sea grande quiere ser jugador de fútbol y sacar campeón a Newell´s.  Este pequeño guardián predica con su ejemplo y todos los domingos se encarga de mantener brillantes los nombres de los excombatientes.

Orgullosa

Mariana Nimitan es la mamá de Nacho y contó que desde que lo llevaron al Monumento y empezó a leer en el cenotafio los nombres de los caídos en la guerra empezó a investigar sobre el tema. “Familiares y vecinos le contaban lo que pasó. Mi esposo trabaja en la parte de cafetería de una librería y le daba para que leyera sobre la guerra”, rememoró la mujer. Mariana contó que su hijo no sólo va todos los domingos a limpiar las placas de los ex combatientes caídos. “Va a reivindicar una parte de nuestra historia. Es un sentimiento de pertenencia que lo tiene incorporado. Está tratando de entender cómo mandaron a chicos a una guerra. Eso le hace ruido y siempre pregunta lo mismo: cómo se enteraron las madres que sus hijos estaban en Malvinas. Él nos enseña diariamente”, explicó Mariana.

Otros de los que estuvo en el homenaje a Nacho este domingo fue Raúl Gómez, secretario del Centro de ex Combatientes de Malvinas. “Son valores que no se pueden perder, que hay que reafirmarlos, apoyarlos y sostenerlos. Las nuevas generaciones se están sumando a esta causa. Este nene con 9 años entendió lo que nos pasó a nosotros en 1982. Malvinas somos todos, fue el horror de la guerra, pero sin saber que íbamos a volver y a vivir otra. Muchos de mis compañeros toleraron la bala de un fusil enemigo, pero no la marginación y el abandono. Nacho es ejemplo para todos”, señaló Gómez.

El precandidato a intendente del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS), Pablo Javkin contó que el Concejo aprobó en la sesión del 28 de marzo el decreto darle el diploma de honor al chico. “La idea surgió del Centro de los ex Combatientes y fue unánime”, explicó el edil. “Es una hermosa parábola ver cómo una causa que se trató de olvidar le provocó esta lección de respeto y compromiso a un chiquito de 9 años no vinculado familiarmente con ex combatientes. Nos da una lección a todos sobre asumir compromisos, que es lo más valiosos que se puede encontrar”, concluyó Javkin.