G.B. tiene 5 años. El miércoles último estaba jugando a los indios con amigos en el barrio San Agustín de la ciudad de Santa Fe cuando una flecha con punta de metal se le incrustó en la cabeza. Sus propios compañeritos de juego se la sacaron, y luego su madre lo llevó hasta el Hospital Iturraspe, pero la gravedad de la herida obligó a trasladarlo hasta el Hospital de Niños Orlando Alassia, donde quedó internado estable pero en estado crítico.
“El chico de cinco años fue derivado desde el Iturraspe y presentaba una herida en la zona frontoparietal”, explicó Osvaldo González Carrillo, director del Hospital Alassia. El médico informó que el pequeño tuvo que ser compensado con “asistencia respiratoria mecánica”, y que lo ingresaron “de urgencia al quirófano central, lo operaron y quedó internado en observación en la unidad de terapia intensiva para evitar un edema cerebral o convulsiones”.
González Carrillo confirmó que el niño presenta “fractura ósea y lesión encefálica”, y que la flecha, de unos 5 milímetros de diámetro, le fue retirada por los propios chicos del barrio antes de ser asistido en los hospitales.
El director del Alassia admitió que el niño “está delicado y hay que ver si no tiene alguna complicación, las primeras horas son cruciales para determinar el estado de salud del paciente”.
“Lo que comentan es que estaban jugando al arco y la flecha. Ahí se produce la lesión, cuando tiran contra un árbol una especie de lanza. El mismo chico que la tiró se la saca, y lo llevan a la casa”, agregó el médico en sintonía con el relato de la madre del pequeño.
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