Un hombre de 34 años fue asesinado de cuatro disparos anteanoche en el barrio Molino Blanco, en el sur de la ciudad. Según fuentes policiales, el muchacho cayó herido en una zanja a metros de su casa y fue llevado por personal del Comando Radioeléctrico al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde murió a las pocas horas. Por el crimen no hay sospechosos y, siempre de acuerdo con la versión oficial, no hubo aporte de testigos para esclarecer las circunstancias en las que fue asesinado.
De acuerdo a lo informado por fuentes policiales, anteanoche alrededor de las 20.30 un llamado al 911 alertó sobre un herido en la calle Frías al 400, en el sur de Rosario. Cuando los uniformados llegaron, encontraron un tumulto de vecinos que rodeaba una zanja. Allí estaba muy mal herido Carlos Gamarra, un hombre de 34 años que había sido baleado en circunstancias poco claras minutos antes. Después de que su mamá aporte sus datos, la Policía lo cargó en el patrullero y lo llevó al Heca.
En el hospital le diagnosticaron cuatro heridas de arma de fuego, dos en el abdomen y otras dos en la espalda. Según voceros judiciales, si bien aún se espera el resultado de la autopsia, se estimó que recibió dos disparos con entrada y salida. Una hora y media después de su ingreso, el hombre murió.
Carlos vivía a metros de la zanja donde fue encontrado y en el frente de su casa quedaron las marcas de varios impactos de bala. Además, los uniformados levantaron cinco vainas calibre nueve milímetros. Según una fuente policial, cuando la Policía intentó buscar testigos de la balacera que terminó con su vida, todos los vecinos se dispersaron y se negaron a aportar datos. Lo único que se estableció es que el hombre caminaba por la calle cuando fue atacado. Según un pesquisa, el hombre no tenía antecedentes penales.
En este sentido, un portavoz judicial agregó que en la investigación que lleva adelante la fiscal Marisol Fabbro, de la Unidad de Homicidios Dolosos, todavía no hay sospechosos ni testigos que hayan aportado datos a la Fiscalía para poder dar con los autores del crimen de Gamarra.
En la investigación por el homicidio intervino también la comisaría 11°, que tiene jurisdicción en la zona del barrio Molino Blanco, y la Policía de Investigaciones.
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