Cultura

Lecturas

Un homenaje a la emoción máxima del fútbol como metáfora de la vida misma

En su libro “El gol menos pensado”, el relator de fútbol santafesino Gustavo Borsato hace un recorrido sobre esa acción deportiva como episodio social en su expansión comunitaria y cultural que tiene impacto en la vida, y también una revisión de sus 30 años de periodismo en el aire radial


En medio de un contexto difícil, por el brutal impacto de la pandemia del Covid 19, un amplio abanico de profesionales invirtió su tiempo en la producción de los más variados textos. En ese marco esos textos asomaron como libros y, de algún modo, serán recordados, aunque todos son historias distintas, como “los libros de la pandemia”.

Uno de esos casos es el libro de Gustavo Borsato, destacado relator de fútbol santafesino que plasmó su pasión al papel, ordenando, sistematizando y puliendo vivencias de 30 años de profesión rescatadas por su madre. Así, de ese conjunto de variables, se materializo El gol menos pensado.

En efecto, el libro es un recorrido sobre las historias de goles desde la perspectiva del escritor, en tanto relator, desde su ingreso a LT10, Radio Universidad Nacional del Litoral, en la ciudad de Santa Fe.

“Después de mudarme mi mamá me trae un montón de cajas y me dice: tomá esto es tuyo. Cuando las abro descubro que eran textos borradores de posibles goles. Evidentemente, los había ido dejando por todos lados. Mi vieja se tomó el laburo de juntarlos y nunca los tiró”, dice Borsato en un tono emocionado por la impensable tarea que se había tomado su madre.

Es que el material recuperado sintetiza 30 años de trabajo-profesión-oficio. Ese sólo hecho ya predispone a sentir curiosidad por lo que guarda el libro.

“Los textos, son todos remates que escribí para goles reales, ocurrieron en su mayoría en partidos de Colón y Unión”, señala el autor.

Sin embargo, ninguno de los textos hace referencia a cuáles son los goles que se sustancian en cada relato.

“Es que la idea principal es que la lectura no se direccione específicamente por el fútbol. En el libro hay homenajes a jugadores de Colón y Unión, a Santa Fe, pero quería ir un poco más allá. Que cada uno que lea el texto pueda elegir ir donde quiera, que sea una mirada personal de los estallidos. El gol es una conjunción de un montón de cosas, de nervios del momento y los días anteriores; de historias y de paisajes. Pero también el libro es una revisión de mí mismo como relator. El gol es un episodio social que tiene al goleador como protagonista pero también al que lo grita, al que lo festeja, atraviesa todo, inclusive al que no lo vive”, afirma Borsato con una pasión que contagia.

Un homenaje al gol como metáfora de la vida misma

La lectura atenta del texto permite percibir que no es un libro de fútbol, en todo caso, con futbol, lo cual dispara múltiples miradas. No es un hecho azaroso, es buscado.

“No quiero ser desagradecido con el fútbol, pero hablo poco de fútbol. Hay, sí, ironía y mucha emoción. Tengamos en cuenta que el fútbol es nuestro espectáculo masivo por excelencia y el gol es el episodio principal. Es un homenaje al gol como metáfora de la vida misma. El gol es un episodio social. Con lo cual es un libro para todas y todos. Sólo hay que saber leer”, remarca Borsato.

En efecto, con una escritura amigable pero sin perder el “olor” a fútbol, el texto se recorre con simpleza y voracidad. Es que las palabras leídas disparan imágenes en simultáneo y dibujan un contexto placentero para el lector. Y hay goles para todos gustos: goles silvestres, De lunes, tristes, De wing. Pero también hay goles salvajes y sucios.

Pero hay dos hallazgos imperdibles; por la concepción de la metáfora literaria que dispara imágenes de emoción brutal: El gol en contra y los goles que no fueron.

Y la perla, claro, el gol de Diego a los ingleses, el mejor de todos los tiempos. El único en el texto con nombre y apellido.

Una transmisión de fútbol debe estar en contexto

Dice Borsato después de 30 años de relatar cientos de goles: “Trato de ser consciente y alzar la bandera de la palabra, la oración, la descripción, la metáfora y el compromiso con el entorno. No concibo abrir una transmisión de fútbol sin hablar del contexto, soy de los que piensan que la narración debe nutrirse de lo que la rodea, esforzarse por tener compromiso social porque la comunicación lo es. Trato de entender los nuevos tiempos, vengo de una generación machista, pero no me persigo, lucho para que me salga naturalmente en el lenguaje. Sé de los nuevos derechos, los cuales comparto plenamente, y busco concientizar porque la comunicación es eso. Lo hago sin forzar y sin intentar una pose, sino tratando ser lo más natural posible. Y cuando estoy en el límite, tengo cuidado. Hay que construir una conciencia crítica, y fundamentalmente hay que capacitarse”.

El gol menos pensado es entonces un texto altamente recomendable. Para leer por placer y emocionarse. Para futboleros y para cualquiera que en algún momento de su vida haya percibido qué significa un gol para el seguidor de algún equipo o lo que implica en el imaginario futbolístico. Sin pretensiones de aleccionar a nadie pero que va desgranando una serie de acontecimientos que evidencian un estado de cosas relacionadas al fútbol. Que transpira fútbol y  atrapa porque lo entiende como un fenómeno social sin igual en estas pampas.

Un texto amable, que no excluye a nadie. Por el contrario incluye a todos y todas. Como el futbol mismo.

Ilustrando en pandemia

El gol menos pensado tiene en cada descripción una ilustración. Hasta allí nada novedoso. La historia de esas ilustraciones sí lo es. “El texto fue escrito en contexto de pandemia con lo cual nunca pudimos juntarnos con los ilustradores para debatir qué dibujo iba en cada texto. ¿Cómo lo resolvimos? Les enviaba el texto y cada uno dibujaba lo que entendía de la lectura.

Algunos de ellos jamás fueron a una cancha y salió bárbaro”, cuenta el autor. Gurú Branding fue la encargada de coordinar la artística. Los ilustradores del libro son Seba Mercau (@seba_mercau_ilustrador), Os Pietro (@gatodragon.comics), Sole Grossi (@ilustradoporsole), Juan de Rossi (@greenmousa), Oz Kill (@oz.kill), Rodrigo Cocco (@rodococco),Agustina Ilari (@agustinailari), Luca Vasallo (@lucalejandro91), Negra Benítez (@ne.bntz) y Nacho Yunis (@nachoyunis).

Comentarios