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Un detenido por el crimen en zona oeste

Según la Policía, manejaba la moto en la que huyó el homicida.


Un joven de 23 años fue detenido anteayer a la noche por personal de la comisaría 19ª, en el marco de la investigación por el asesinato de César Oviedo, ocurrido en inmediaciones de Felipe Moré y Uruguay, en la zona oeste. Según fuentes del caso, el arrestado sería el conductor de la moto que tenía como acompañante al autor del homicidio, quien está siendo intensamente buscado.

Oviedo, de 34 años y vinculado al Frente Popular Darío Santillán, murió alrededor de las 18.30 de anteayer, casi una hora después de ingresar al hospital Carrasco con una herida de bala en el pecho.

La noticia de su muerte desencadenó una feroz pueblada en la zona donde ocurrió el hecho, que hasta anoche seguía siendo confuso para los investigadores de la Unidad Regional II. Lo único certero que tenían los pesquisas eran los apodos de los dos presuntos responsables del hecho, uno de los cuales fue atrapado anteanoche durante un allanamiento realizado en inmediaciones de la zona.

El arrestado, M. A., de 23 años, quedó tras las rejas por encubrimiento y sería indagado en la mañana de hoy, indicaron fuentes del caso. Junto al joven fue apresado un hombre de 32 años, quien luego fue liberado.

En tanto, al cierre de esta edición continuaba la búsqueda del autor material del crimen, a quien allegados a la víctima vincularon con un búnker de drogas que funcionaba en la esquina donde Oviedo fue herido, construcción de material que fue derribada por vecinos tras conocerse el deceso del hombre de 34 años.

El buscado tiene domicilio en la zona donde se produjo el crimen, pero anteanoche no volvió a su casa, confió un vocero, quien además mencionó que fue buscado en varias viviendas, sin éxito.

César Oviedo fue baleado cerca de las 17.30 de anteayer en inmediaciones de Uruguay y Felipe Moré, por un joven con el cual habría discutido. Fue llevado por un vecino en un auto particular hasta el hospital Carrasco, donde falleció casi una hora más tarde, producto de un proyectil calibre 9 milímetros que le perforó el pecho.

Apenas fue herido, vecinos de la zona se congregaron en el lugar donde Oviedo cayó, y cuando se conoció la noticia de su muerte, quemaron y luego derribaron el búnker de drogas que tenía como “soldadito” al supuesto homicida.

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