Policiales

Violencia de género

Un albañil quedó preso por abusar y obligar a prostituirse a su ex: también atacó a su hijastra

El fiscal acusó al agresor por someter a su ex durante unos cinco años donde aprovechaba la situación vulnerabilidad económica y psicológica de la víctima. También fue imputado por los ataques sexuales que sufrió la hijastra cuando estaba en la escuela primaria y por amenazarla para no dijera nada

Fiscal Aldo Gerosa

Un albañil de 42 años fue imputado por obligar a su ex pareja a prostituirse durante al menos cinco años en la localidad de Reconquista, del departamento General Obligado. El fiscal contó que el explotador se aprovechaba de la situación de vulnerabilidad económica y psicológica de la mujer sobre la que además ejercía violencia física y la obligaba a mantener relaciones sexuales contra su voluntad. Pero no fue la única víctima, la hija de la mujer, cuando se encontraba en edad escolar, sufrió ataques sexuales sistemáticos y frente a sus hermanos que eran obligados a guardar silencio, contó la Fiscalía. El juez Mauricio Martelossi, que presidió la audiencia, dispuso la prisión preventiva del sospechoso por el plazo de ley.

Santiago Daniel R. fue detenido el último día de abril pasado. Fue imputado y este martes quedó detenido preventivamente. Según la imputación fiscal a cargo de Aldo Gerosa, entre los años 2014 y 2019 el imputado obligó a su ex pareja a prostituirse, quien bajo su estricto control “estipulaba el precio que debía cobrar por realizar prácticas sexuales y la llevaba a lugares de encuentro con clientes”.

El funcionario contó que Santiago Daniel R. “se valió de la situación de vulnerabilidad económica, psicológica y de género de la víctima”, y remarcó que “el hombre la agredía, la amedrentaba y administraba la totalidad del dinero recaudado”, incluso “en ocasiones la obligó a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad”.

La otra víctima

El fiscal explicó que “el imputado vulneró la integridad sexual de la hija de su pareja mientras la menor transitaba los últimos años de la escuela primaria”.

Gerosa señaló que “el hombre llevó adelante su accionar delictivo cuando la mujer no estaba en la vivienda que compartían”, y narró que “los abusos ocurrieron frente a una niña y un niño, hermanos de la víctima, y eran coaccionados para que guardaran silencio”.

El fiscal agregó que “el año pasado, cuando el imputado y la mujer ya no convivían, él se dirigió hasta donde ella reside junto con sus hijos, la atacó y le produjo heridas leves con un cuchillo”.

Según añadió, “días después, la amenazó con volver hacerle daño”, lo que derivó en una restricción de acercamiento que el agresor violó en cuatro oportunidades, incluso una de las veces le rompió el celular a la víctima cuando intentó filmarlo, contó. Además no cumplió con un convenio de cuota alimentaria de 2500 pesos para sus hijos.

Tras describir los tormentos por lo que pasó la víctima, el fiscal lo imputó como autor de abuso sexual con acceso carnal reiterado, explotación económica de la prostitución ajena agravada por mediar violencia, amenaza, intimidación o coerción, y por haberse aprovechado de una situación de vulnerabilidad que el propio imputado creó y mantuvo. También le sumó los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género, amenazas, cuatro hechos de desobediencia de un mandato judicial y daño. Todos estos respecto a su ex pareja.

En cuanto a la niña, los delitos achacados fueron abuso sexual con acceso carnal reiterado y agravado por el aprovechamiento de la convivencia con una niña menor de 18 años y promoción de la corrupción de menores de edad agravada por haber sido cometida en perjuicio de víctimas menores de 13 años, por mediar violencia, amenaza, intimidación o coerción y por la convivencia. También fue imputado por incumplimiento de los deberes de asistencia familiar de sus propios hijos menores de edad.

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