La cúpula del radicalismo le pidió ayer al gobierno que prorrogue las sesiones ordinarias del Congreso o que convoque a extraordinarias para debatir la ley del Presupuesto, a la vez que denunció que la Casa Rosada prefiere no tener la norma sancionada. Fue un día después de que fracasara por segunda vez el intento oficialista por tener aprobado el cálculo de gastos y recursos para 2011, justamente por falta de quórum opositor.
En tanto, el resto de las fuerzas anti-K también pidió una sesión especial para el miércoles, pero con el fin de tratar otras temas como Indec, Ganancias y deudas hipotecarias (ver aparte).
“El gobierno ha decidido clausurar el año parlamentario y el debate del Presupuesto, lo que es muy grave para la salud institucional del país y es el propio gobierno el primer obstáculo para tener Presupuesto”, denunció el presidente de la UCR, Ernesto Sanz.
Tras una reunión en la casa radical, el senador mendocino advirtió que el Poder Ejecutivo nacional “quiere gobernar el año que viene con el Presupuesto de este año para administrar con esos recursos más los que obtenga en 2011”.
Sanz ofreció la conferencia escoltado por Ricardo Gil Lavedra; el precandidato presidencial Ricardo Alfonsín, y los jefes de los bloques de la UCR en Diputados, Oscar Aguad, y en el Senado, Gerardo Morales.
Alfonsín dijo que “el gobierno no quiere un presupuesto” y la UCR “no puede aceptar esto por su responsabilidad no ya partidaria sino nacional”. “Aquí se trata de que habrá unos 50 mil millones de pesos que el gobierno pretende gastar en 2011 sin controles y esto no lo podemos aceptar. Ésa es la discusión que queremos dar”, precisó el diputado, y agregó que a la Casa Rosada “le conviene quedarse sin presupuesto”.
Tras esta evaluación la UCR anunció que está dispuesta a sentarse en el recinto de ambas Cámaras para debatir la ley de leyes siempre y cuando el oficialismo propicie el debate en comisión y contemple los reclamos del partido.
La UCR reclama la eliminación de los superpoderes y la incorporación del 82 por ciento móvil para las jubilaciones mínimas y la regulación de los excedentes de la recaudación por la inflación.
Morales, por su parte, opinó que lo que busca la oposición es “fijar algunos límites” como por ejemplo que el dinero “excedente de recaudación sea destinado exclusivamente a gastos previsionales y sociales y no a otra cosa”.
Aguad, en tanto, consideró que la oposición “quiere darle un presupuesto al gobierno” pero que no aprobará un proyecto “a libro cerrado” y que está dispuesta a dar quórum si el oficialismo accede a debatir primero el tema en la comisión de Presupuesto de Diputados.
Sin brújula
En tanto, el diputado nacional del Frente para la Victoria Juan Carlos Dante Gullo aseguró ayer que “durante todo el año la oposición no encontró la brújula, lo que permitió llegar a esta situación tan crispada y autoritaria” durante la discusión del Presupuesto.
Agregó que a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner “no le preocupa” la sanción del Presupuesto porque “va a gobernar igual”. “Es imposible que no podamos discutir seriamente el Presupuesto y es tremendo que ciertas bancadas opositoras que fueron gobierno y tuvieron el respaldo en condiciones harto complejas para el país no le voten el proyecto al oficialismo”, dijo el legislador
Por su parte, el diputado nacional por Nuevo Encuentro Martín Sabbatella sostuvo que “la estrategia opositora es irracional e irresponsable” y que la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, “quiere generar el Apocalipsis que había pronosticado y no pasó”.
“Habían pronosticado caos y, como no sucede, quieren hacer todo lo posible para que se produzca”, opinó Martín Sabbatella al señalar la “irresponsabilidad de la oposición que deja a la presidenta sin una herramienta de gestión como es el Presupuesto nacional”.
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