En el marco de la escalada militar de Estados Unidos en la península coreana ante los programas balísticos y nucleares de Corea del Norte, el presidente estadounidense Donald Trump desafió ayer el líder norcoreano Kim Jong-un con una contundente advertencia: “Portate bien”.
“¿Tiene usted un mensaje para Kim Jong-un?”, preguntó un periodista al presidente republicano, quien participaba en la tradicional búsqueda de huevos de Pascua en los jardines de la Casa Blanca. “Portate bien”, respondió Trump.
La frase de Trump coincide con las declaraciones de su vicepresidente Mike Pence, quien visitó ayer Corea del Sur, y advirtió a Pyongyang que Estados Unidos tendrá “una respuesta apabullante” ante un eventual ataque. Como respuesta, el director general de Organizaciones Internacionales de Corea del Norte Kim Chang-min no descartó “una guerra total” entre ambos países, y acusó a Trump de preparar “un ataque preventivo para derrocar” al gobierno de Kim Jong-un.
“Hoy en la península de Corea se ha creado una situación extremadamente peligrosa en la que nadie puede prever cuándo se va a quedar fuera de control y a derivar en una guerra total”, aseguró ayer Kim Chang-min.
Las declaraciones de este alto funcionario de la cancillería norcoreana se conocieron después de que Pence le sugiriera a Pyongyang no poner a prueba la determinación de la Casa Blanca para resolver por la vía militar el conflicto en la península coreana.
“En las últimas dos semanas el mundo contempló la fuerza y la determinación de nuestro nuevo presidente con las acciones emprendidas en Siria y Afganistán. Corea del Norte haría bien en no poner a prueba su determinación o el poder del ejército de Estados Unidos”, destacó Pence durante una conferencia de prensa junto con el presidente interino sudcoreano, Hwang Kyo-anh.
“Queremos lograr una solución a la crisis por medios pacíficos. Aun así, todas las opciones están sobre la mesa”, advirtió el vicepresidente estadounidense en alusión a una salida bélica.
En este sentido, Kim Chang-min aseguró que “sería un error esperar que Corea del Norte responda como Siria, que no tomó ninguna medida después de haber sido atacada por Estados Unidos”.
“Washington dice que están todos las opciones sobre la mesa. No sólo ellos, nosotros también tenemos nuestras propias opciones”, declaró el alto funcionario norcoreano.
El propio Kim Chang-min, personalmente, aprovechó el 71º aniversario de la independencia de Siria para enviarle un mensaje al presidente sirio Bashar al Asad, en el cual condena como un “acto temerario de invasión” el ataque estadounidense del 7 de abril pasado a una base aeronáutica siria.
Kim Chang-min también expresó su “firme apoyo y solidaridad a los esfuerzos del gobierno y del pueblo de Siria para lograr la justicia”, en una nueva muestra de la buena relación entre los líderes de ambos países, que se suma al telegrama de felicitaciones a Assad por el 70º aniversario de la fundación de su partido, el gobernante Baaz.
Equilibrio de China y Rusia
El cruce de advertencias entre Estados Unidos y Corea del Norte que elevó la tensión diplomática estuvo terciado por la intervención de las cancillerías de China y Rusia, cercanos a Pyongyang, que intentaron bajarle el tono a la disputa.
Buscando hacer equilibro entre la condena a los ensayos misilísticos norcoreanos y las convocatorias a la tranquilidad, el gobierno chino llamó a la calma en la península coreana y urgió a ambos países a “evitar provocaciones”.
“Queremos dejar claro, una vez más, que la situación en la península de Corea es compleja y delicada, por lo que urgimos a todas las partes a evitar provocaciones”, señaló ayer durante una conferencia de prensa el vocero del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Lu Keng.
“El diálogo y la consulta son la única vía posible para la resolución del problema”, agregó.
Por su parte, el canciller ruso Serguei Lavrov se mostró confiado en que Washington no lleve adelante acciones unilaterales “como las de Siria”.
“No aceptamos las aventureras acciones nucleares y con misiles de Pyongyang que violan numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, sostuvo Lavrov en una conferencia de prensa, en la que también consideró que cualquier respuesta unilateral de Estados Unidos también estaría violando los acuerdos internacionales.
El jefe de la diplomacia rusa realizó estas declaraciones después de que Corea del Norte cumpliera su amenaza de lanzar un misil, que falló, en coincidencia con la llegada a Seúl de Pence.
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