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Triste final para una pareja

Un policía retirado fue a visitar a su ex esposa en la tarde de ayer y luego de una discusión, la asesinó de tres tiros. Un rato más tarde se suicidó disparándose en la sien delante de varios compañeros.

Eran poco más de las 15 de ayer cuando tres estruendos sacudieron a los vecinos del barrio Sagrada Familia, en el extremo sudoeste de la ciudad. Algunos vecinos creyeron que podían haber sido disparos, pero al asomarse no vieron nada extraño y siguieron en lo suyo. Pero, pasadas las 17, un llamado al 911 denunció que en la casa ubicada en la Manzana D Nº 29, perteneciente a la familia González, había una persona fallecida. A los pocos minutos, llegaron al lugar varios policías que ingresaron a la casa y se toparon con un agente retirado, de 56 años, con un arma en la mano derecha. Casi media hora después, otro estruendo hizo saltar al centenar de personas que a esa altura estaba en la puerta queriendo saber qué había pasado. Ahí recién fueron anoticiados de que Raúl González, un policía retirado de 56 años, había asesinado de tres disparos a su mujer, identificada como Blanca Alegre, de 55, y luego se descerrajó un tiro en la sien, pese al pedido en contrario de varios compañeros que estaban en la casa.

 Raúl y Blanca estaban en pareja desde hacía más de 35 años. “Toda una vida”, dijo ayer una de las hermanas de la mujer. Pero en los últimos tiempos la relación entre ambos se había deteriorado. “Ellos se llevaron bien hasta hace tiempo, que él comenzó a agredirla. Una vez le puso una pistola en la cabeza a uno de sus hijos y gatilló y a mi Blanca varias veces le dijo que la iba a matar”, rememoró una de sus hermanas. “Yo sabía que esto iba a terminar mal”, reflexionó otra familiar.

 El triste final comenzó a gestarse cerca de las 15 de ayer, comentaron fuentes del caso, cuando Raúl Orlando González llegó a la vivienda donde hasta hace poco menos de un año vivió junto a Blanca Estela Alegre, tres de sus cuatro hijos y una nieta que hoy tiene 4 años.

 La mujer había hecho una denuncia en Tribunales por maltratos y, si bien el hombre tenía una exclusión de hogar, de vez en cuando iba a la casa del barrio Sagrada Familia, un desprendimiento ubicado al sur de barrio Tío Rolo, para ver a sus hijos y charlar con Blanca.

 Pero en los últimos tiempos las visitas terminaban en discusión, por lo que las mismas eran cada vez más espaciadas, recordaron vecinos . Nada hacía prever que ayer el final iba a ser distinto al habitual, aunque en un momento, y por causas no develadas, el hombre sacó de entre sus ropas un arma de fuego y comenzó a amenazar a su ex mujer y a la mayor de sus hijas, que estaba junto a la nieta del hombre. “La hija agarró a la nieta y salió rápido de la casa, sino capaz que también las mataba a las dos”, apuntó un familiar de la víctima.

 Según fuentes policiales, minutos después de las 15 el hombre le efectuó tres disparos a su ex pareja, uno en el pecho y dos en la cabeza, en la habitación ubicada en la parte posterior de la casa 29 de la calle 2142.

 Cerca de las 17, un llamado al 911 desde un teléfono celular dio cuenta de un homicidio en ese lugar, por lo que a los pocos minutos varios patrulleros llegaron hasta la vivienda. Cuando entraron, los uniformados no vieron demasiado desorden en la casa, pero en una pieza ubicada al fondo encontraron tirada en el piso a una mujer, con tres impactos de bala, uno en el pecho y dos en la cabeza.

 Segundos después los policías ubicaron a Raúl González, un policía retirado hacía una década, con un arma 9 milímetros en la mano derecha “montada para disparar”, explicaron las fuentes.

 Ante esto, varios policías comenzaron a dialogar con su ex compañero, pero alrededor de media hora después levantó su arma y sin que nadie pudiera impedirlo, se efectuó un disparo en la sien, falleciendo a los pocos minutos.

 “Hacía un año que estaban separados, y él se había ido a vivir con una hermana, pero venía siempre. Estuvieron juntos toda la vida, pero todo terminó de la peor manera”, dijo una de las hermanas de Blanca.

 En tanto, la Policía investiga si el llamado alertando sobre el hecho fue realizado por el propio González desde su teléfono celular.

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