Dos jóvenes de 21 y 25 años y un hombre de 41 deberán purgar casi una década de cárcel por el crimen de Diego Mariño, ocurrido en julio del 2019 en Granadero Baigorria, tras un festejo de cumpleaños. Los sospechosos fueron identificados rápido y este lunes reconocieron su participación en el hecho y consintieron la condena mediante un procedimiento abreviado. La jueza Silvia Castelli resolvió homologar el acuerdo y dictar condena para el trío.
La tarde del 27 de julio de 2019 Mariño fue con su primo y su pareja a un festejo de cumpleaños en la vecina localidad. En un momento mantuvo una discusión con algunos de los asistentes y decidieron salir. Según la investigación que llevó adelante el fiscal Ademar Bianchini, la víctima y sus acompañantes fueron interceptados en la zona de Camino Muerto y Eva Perón por Ezequiel Darío “Napio” Gómez de 25 años, Jonatan Nicolás “Jony” González de 21 años, y Claudio “Ojito” Gómez, de 41 años. La víctima corrió e ingresó a una casa para refugiarse pero los agresores entraron por la fuerza. Llevaban consigo armas blancas y objetos contundentes.
Según el fiscal, Jonatan González le asestó una puñalada en zona del tórax que resultó fatal y al retirarse amenazó a una persona que estaba en el lugar para que no contara lo ocurrido. El trío fue identificado en poco tiempo y luego de algunas medidas investigativas los acusados fueron detenidos.
Bianchini los imputó por los delitos de homicidio simple, violación de domicilio y amenazas coactivas calificadas por el uso de arma de fuego y quedaron presos preventivamente.
Este lunes el fiscal y las defensas de los acusados presentaron ante la jueza Castelli un acuerdo al que arribaron sobre el hecho, la calificación legal y la propuesta de pena a imponer. Contaron que el convenió tenía la anuencia de la familia de la víctima y propusieron una condena de 9 años y 6 meses para el trío.
Tras evaluar el caso la magistrada resolvió homologar el acuerdo y condenar a Darío Gómez, Jonatan González y Claudio Gómez a la sanción propuesta por el crimen de Mariño y la intromisión por la fuerza y las amenazas que sufrió la persona que estaba en la casa donde la víctima intentó refugiarse.
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