A una semana del superclásico, Boca no pudo mejorar su estado de ánimo y Tigre profundizó una grieta futbolística que parece no tener solución a corto plazo. Con tres goles de Carlos Luna, el conjunto de Victoria ganó 3 a 0 y dejó a los xeneizes a solo tres unidades de Atlético Tucumán, que ocupa la última ubicación del torneo Clausura.
Boca empezó mejor, gracias al trabajo de Martín Palermo, pero la última línea del equipo que dirige Abel Alves volvió a fallar y toda la ilusión xeneize se desvaneció ante el primer ataque de Luna, que se aprovechó de las facilidades defensivas y definió de zurda ante la salida del joven Javier García.
A los 19, Juan Román Riquelme tuvo en sus pies el empate. Cuando parecía que no iba a fallar, amagó y le dio tiempo a Daniel Islas para poder tapar, a medias, su remate. Luego, Leyes sacó sobre la línea una pelota que tenía destino de red. A continuación, un par de centros de Tigre dejaron en evidencia los padecimientos del visitante, pero el segundo tanto llegó recién a los 43, cuando Luna conectó con una palomita un centro desde la derecha, tras un error de Luiz Alberto. Erbes y Riquelme probaron de media distancia, pero no comprometieron el resultado parcial.
En la segunda mitad, Boca salió a buscar la igualdad, pero con el pasar de los minutos se sucedieron ocasiones desperdiciadas y Alves empezó a juntar delanteros que no encontraron la solución. Mouche, Palermo y Viatri chocaron una y otra vez con el buen trabajo de Tigre. A los 33, el palo le devolvió dos veces la pelota a Lucas Viatri y la impotencia se apoderó de Boca. Pero ya estaba todo definido: Luna había marcado su tercer tanto de la noche, sentenciando una goleada en la que los xeneizes no encontraron respuestas. Tigre se aprovechó de su rival y lo dejó con el ánimo por el piso de cara al choque ante River, el próximo domingo en la Bombonera.
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