Edición Impresa

Testigo complicó al letrado que atropelló y mató a niño

Dijo que el conductor del Clio hizo señas a quienes estaban en la esquina para que se corrieran y aceleró.

El abogado que el domingo pasado atropelló y mató a un niño de dos años al subirse con su auto a la vereda para resguardarlo de la caída de granizo, quedó muy comprometido ayer, luego de la declaración de una de las personas que estaba en la esquina de Güemes y Callao al momento del siniestro. Fuentes judiciales indicaron que el hombre que estaba junto al matrimonio y sus tres hijos pequeños –entre quienes estaba la víctima fatal– cuando el conductor del Renault Clio ascendió a la vereda sostuvo que el imputado hizo “señas” a las personas que se refugiaban debajo de un toldo para que se corrieran y que luego aceleró.

El testimonio del testigo, identificado como Leonel, de 38 años, que ayer fue judicializado ante la magistrada correccional, Marisol Usandizaga, no condice con la versión que el conductor, Leandro Guillermo M., dio el domingo en sede policial de que no había advertido la presencia de personas cuando subió el auto a la vereda.

Ayer a la mañana, la jueza hizo una inspección ocular en la ochava sudeste de Callao y Güemes y hoy le tomará declaración al abogado de 26 años imputado de homicidio culposo, aunque la carátula podría modificarse a doloso, sostuvieron voceros del caso.

Es que el testimonio brindado ayer por Leonel pone en duda que la muerte del niño haya sido un mero accidente y da cuentas de que el conductor del rodado no sólo vio a las personas que se refugiaban debajo de un toldo sino que les pidió que se corrieran. “Llego a la esquina de Callao y Güemes. Llovía fuerte. Me resguardo debajo de un techito junto a un matrimonio y sus tres hijitos. Para un auto que venía por Güemes por el semáforo de Callao. Intenta subir a la vereda pero no pudo por el cordón. Da marcha atrás, nos hace seña con las manos para que nos corramos. Con el papá del nenito nos miramos y nos preguntamos «¿Qué le pasa a éste? » y en eso el tipo acelera”, sostuvo el testigo.

Leonel relató que alcanzó a treparse de una reja y que el auto lo golpeó en el pie, cuando comenzó a escuchar al papá del niño gritar: «Corré el auto, corré el auto». Debajo del vehículo que conducía el abogado estaba José Francisco Pris, de dos años, gravemente herido.

“Decime que esto es mentira, decime que esto no está pasando”, gritaba el papá del niño que tenía convulsiones y sangraba por la boca, recordó Leonel.

Junto al pequeño, que fue llevado en un auto particular al hospital Provincial del Centenario, estaba su mamá y sus dos hermanitos, uno de tres años y una beba de meses.

El siniestro ocurrió alrededor de las 17.30 del domingo, cuando varias personas se refugiaron bajo un alero, en la esquina de Callao y Güemes, ya que a esa hora se precipitó sobre la ciudad una intensa lluvia, que fue acompañada por una pequeña pedrea.

Cuando comenzaron a caer las piedras, un Renault Clio 2 color negro que venía circulando por Güemes frenó en la esquina de Callao y, al ver el alero, intentó resguardar su auto de la tormenta en esa ochava.

Por esa acción fue embestido José Francisco Pris, un chiquito de 2 años, que estaba junto a su familia bajo el alero, también refugiándose de la tormenta. El niño, gravemente herido, fue trasladado de urgencia hasta el hospital Centenario por un auto que pasaba por el lugar, y falleció minutos después de las 20 como consecuencia de las múltiples lesiones ocasionadas por el impacto, indicaron los pesquisas. 

Inspección en Pichincha

Entre las medidas que tomó la jueza correccional Marisol Usandizaga, a cargo del caso, ayer realizó una inspección ocular en la que trató de establecer las posibles maniobras que realizó el conductor del Clio. Además, la jueza se movilizó hasta los departamentos de cuyos balcones fue observado el episodio y habló con los testigos que podrían haber presenciado el hecho desde la altura.

Aún resta encontrar a una testigo que estaba parada a pocos metros de donde ocurrió la muerte del pequeño junto a dos chicos de entre 10 y 12 años que utilizaban una skate y que, según indicaron fuentes del caso, se habría subido junto a los chicos a un interno de la línea 110 a eso de las 18. Desde el Juzgado Correccional 5ª solicitaron que la testigo se presente a declarar.

Asimismo, la magistrada solicitó colaboración a la población para dar con las personas que llevaron al niño al hospital Centenario en un auto particular, que según se desprende de la investigación fue “parado” por la madre del pequeño en estado de desesperación.

La semana entrante, con el imputado indagado y los testimonios recolectados, se llevará a delante la reconstrucción de los hechos, adelantó una fuente judicial.

Comentarios