El Hincha
La ilusión de Ezequiel Lavezzi de ponerse la camiseta de Central parece lejana. En su despedida del Hebei Fortune de China el Pocho aseguró el miércoles que tiene prácticamente tomada la decisión de retirarse del fútbol profesional. Y esa situación provocaría que su desembarco en el Canalla para el año que viene sea toda una utopía.
Sin embargo, el mismo miércoles el vicepresidente primero de Central, Ricardo Carloni, realizó algunas declaraciones en las cuales indicó que mantienen diálogo fluido con el representante del delantero, pero el Pocho desde hace un buen tiempo no tiene agente.
Rápido de reflejos el directivo canalla utilizó su cuenta personal de Twitter para aclarar.
“Rectifico, nuestro Director Deportivo se contactó con el Sr. Diego Lavezzi, quién tiempo atrás manifestó la posibilidad de la llegada del Pocho a Rosario Central, para conocer situación actual del jugador”, escribió Carloni en la red social del pajarito.
Con esta situación planteada, quien recogió el guante y de algún modo salió al cruce de Carloni fue el hermano del Pocho, Diego Lavezzi, para aclarar ciertas cuestiones.
Lavezzi hizo declaraciones en Radio Dos y aprovechó la chance de desmentir la palabra de Carloni.
“Dijo que había hablado con el representante de mi hermano y el hace un año que no tiene ningún representante. A mí nunca me llamó y sólo gestiona a través del micrófono”, disparó el presidente de Coronel Aguirre.
Algo que sí confirmó el mayor de los Lavezzi fue que dirigentes de Central se contactaron con él para conocer la situación del Pocho.
“Rodolfo (Di Pollina) me llamó el martes a la noche, pero ese fue el único contacto que tuvimos. Hablé el martes con Rodolfo y el miércoles mi hermano salió a decir que no juega más. Que lo expongan así, me da mucha pena”, afirmó Diego demostrando cierta molestia con parte de la dirigencia auriazul.
En cuanto al padecimiento de su hermano por el estado de su rodilla, Diego Lavezzi puntualizó: “Se operó pensando que eran meniscos y cuando abrieron se dio cuenta que era otra cosa. Fue un año complicado para él, la pasó muy mal, es una locura que venga a jugar así”, se sinceró Lavezzi.
Y agregó: “Se llevó un kinesiólogo de Argentina a trabajar con él y no le alcanzó, se lo llevó al Negro Mendoza (reconocido profesional) para ver si podía despedirse jugando, que fue lo que hizo. Ahora respetaremos la decisión que tome, como familia lo que queremos es que sea feliz”, cerró el hermano del Pocho, en misma sintonía que el atacante de 34 años que parece estar muy cerca de confirmar su retiro pese a que en Arroyito aún mantienen una mínima esperanza en que revierta su decisión.
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