David Ferrara
Con el recurso de la defensa zonal para poder sobrellevar la ausencia de una referencia interior dominante, Temperley supo generar los caminos para derrotar a Regatas en el Morosano por 73 a 71 y mantenerse en el grupo de elite de la zona 1 de la Superliga.
Fue uno de esos encuentros de los tantos que existen en este torneo local, en el que la paridad gana terreno cuando los rivales comparten carencias momentáneas y se reparten algunas pocas virtudes. Y el Negro, que integra el selecto grupo de los elencos que habita la parte alta de su zona, sufre desde la salida de Nahuel Más las penurias de la clase media baja del básquet local, aunque batalla con esfuerzo para no abandonar los puestos de elite.
Es que si bien no perdió a una estrella, sí se quedó sin su referencia interior, el que aportaba gol cerca del cesto y quién podía recibir la pelota y generar desde allí. Ahora la responsabilidad sobrecarga a Zorrilla, Beltramino o Fran López, que se prodigan para intentar cumplir una tarea que no es la suya.
Por su parte, quizás a Regatas le falte el poderío perimetral del que dispone Temperley, pero sí cuenta con un faro interior como es Gonzalo Garrofé.
En ese mapa de situación la primera mitad fue de marcada paridad, intercambiando virtudes y defectos. El buen ingreso de Cacciavillani y el dominio de Garrofé le abrieron una puerta a los visitantes que atravesaron su mejor momento para sacar ventaja de 43 a 37 ante un rival que no podía afirmarse atrás y que además sufría adelante contra la imposibilidad de meter la bola cerca del cesto.
Temperley debía encontrar un quiebre para cambiar la historia, porque la dependencia del triple era un camino sin retorno. Y ese quiebre llegó en forma de defensa zonal 2-3 para opacar a Garrofé y compañía. De aquel 43 a 37 se generó un parcial de 17 a 3 para el 54 a 46 con el que se cerró el tercer segmento gracias a buenas defensas, impericia ofensiva de la visita y varias contras del dueño de casa.
Cambió el trámite, cambió el ánimo para el delirio de la inclaudicable hinchada del Negro, pero a Temperley le faltaba concretar el trabajo, y allí sufrió buen rato contra la reacción de Regatas, que encontró al fin juego cerca del cesto y arrimó hasta generar un susto, pero no pudo contra la efectividad del Negro en la línea de libres.
Quizás sea Temperley hoy por hoy el más terrenal de los candidatos a estar entre los cuatro mejores del certamen, por eso la convicción y el trabajo deberá ponerse al servicio de la búsqueda de triunfos. El domingo la defensa zonal fue el aliado clave.
SÍNTESIS
TEMPERLEY 73: Álvaro Roig 4, Augusto Capra 4, Andrés Ottolini 24, Lucio Beltramino 9, Gonzalo Zorrilla 3 (fi), Luca Amigo 17, Francisco López 12, Bautista Moresco 0. DT: Hernán Corte
REGATAS 71: Luciano Pansarasa 6, Valentino Marro 2, Ángelo Carlachiani 6, Juan Martín Luchilo 4, Gonzalo Garrofé 20 (fi), Felipe Morello 4, Fabrizio Giorgio 8, Iván Cardona 11, Bruno Cacciavillani 10. DT: Luciano Bevevento.
ESTADIO: Alfredo Morosano
ÁRBITROS: Bosio y Colman
PARCIALES: 13/14, 32/32 y 54/46
Superliga, zona 1
Temperley 14-4
Provincial 15-0
Caova 13-3
Atalaya 12-5
Regatas 10-9
Unión AS 9-9
Unión y P. 8-9
Newell’s 8-9
Fisherton 7-12
Atlantic 7-11
Calzada 5-13
Ciclón 4-12
Saladillo 0-16
Superliga, zona 2
El Tala 16-0
Sportsmen 15-2
Talleres 13-4
Náutico 11-7
Estudiantil 11-7
Alumni 8-7
Echesortu 9-10
Tiro Suizo 7-12
América 7-11
Central 5-14
Libertad 6-11
Gimnasia 5-12
Sp. Federal 1-17
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