Trabajadores de prensa, comisiones internas, organizaciones sindicales, sociales y políticas y legisladores nacionales se movilizaron ayer desde la sede de la agencia Télam, a tres cuadras de la Plaza de Mayo, hasta el Centro Cultural Néstor Kirchner, en la costanera central, donde reclamaron la reincorporación de los 354 despedidos y de “todos los cesanteados por la gestión que encabezan los ex periodistas Rodolfo Pousá, Ricardo Carpena y Pablo Ciarliero, a instancias del vaciador de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi”.
Las puertas del segundo edificio de la agencia, que está a unos 300 metros, del ubicado en Bolivar al 500, en San Telmo, fueron el escenario para la nueva asamblea de trabajadores de la agencia pública, quienes votaron mantener el paro total y la toma pacífica de los edificios, además de movilizarse. En la manifestación, la Policía porteña montó un fuerte operativo que incluyó un centenar de efectivos de Infantería con bastones, escudos y armas. En paralelo, asambleas en las redacciones de Clarín, Editorial Perfil, Diario Popular, BAEy la Televisión Pública, donde se sumaron el Sindicato Argentino de Televisión SAT y de Asociación del Personal Jerarquizado, resolvieron acciones de solidaridad. Y en el interior la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa convocó a actos de abrazo simbólico a las corresponsalías de Télam. Por su parte, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) concretó una segunda presentación formal en el Ministerio de Trabajo de la Nación, que amplió fundamentos para el pedido de conciliación obligatoria en el conflicto.
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