El gobierno de Santa Fe, a través de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (Apsv), dependiente del Ministerio de Seguridad, controló más de 50 mil vehículos en las rutas santafesinas, durante el mes de enero en el marco del Operativo Verano.
El objetivo es disminuir los accidentes en época de vacaciones, por lo que la Apsv intensificó los puntos de control y la cantidad de tests de alcoholemia en distintos horarios. Hicieron 4200 tests, de los cuales 200 dieron resultado positivo. “Detectamos un caso de un chofer profesional con 1,59 de alcoholemia positiva. Para ellos el permitido es 0. Es muy grave que no cumplan con lo que indica la ley”, aseguró el subsecretario de Apsv, Osvaldo Aymo.
“Queremos destacar que este es un cambio de enfoque a nivel de política de control. Estamos convencidos que la responsabilidad del Estado es hacer que los ciudadanos cumplan las normas y para ello tenemos que instrumentar sistemas de control efectivos las 24 horas. En Venado Tuerto, por ejemplo, en un control sobre la ruta 8 detuvimos a un motociclista con 2,27 gramos de alcohol en sangre. No le permitimos seguir circulando”, explicó Aymo.
“Sabemos que el consumo de alcohol genera una disminución en las funciones esenciales para la conducción, y está asociado a la ocurrencia de siniestros viales que, muchas veces, tienen consecuencias graves. Por eso decidimos que los controles se hagan todo el día, no sólo de noche y fines de semana. La gente debe saber que estamos controlando y que esta acción nos brinda seguridad a todos, porque evita accidentes por esta grave conducta”, agregó el funcionario.
Durante enero, los agentes de la Policía de Seguridad Vial llevaron a cabo 1618 operativos de control vehicular y alcoholemia en más de 28 puntos fijos y móviles de todo el territorio provincial. Fiscalizaron más de 50 mil vehículos para garantizar las condiciones reglamentarias de circulación, tales como uso de cinturón de seguridad en todos los ocupantes del vehículo, consumo de alcohol, portación de documentación obligatoria, uso de luces bajas, sistemas de retención infantil. Entre los vehículos controlados se detectaron infracciones de diversa índole que generaron el labrado de 10.431 actas.
Además, el personal de la PSV remitió 76 vehículos a corralones municipales, retuvo 202 licencias de conducir, labró 178 prohibiciones para circular y realizó 22 cesiones de conducción.
A su vez, incrementaron los controles a conductores profesionales, tales como transporte de carga y de pasajeros. Esta semana se llevaron a cabo varios operativos exclusivamente para choferes profesionales en diversos puntos de la provincia, en los cuales se hicieron controles a 58 conductores y 30 tests de alcoholemia, todos con resultados negativos. Se labraron 12 actas por distintas infracciones y una prohibición para circular.
En Rosario, 18 casos de alcoholemia y uno de narcolemia
Como parte de los operativos preventivos y de control vehiculares nocturnos que llevó adelante la Secretaría de Control y Convivencia municipal durante el fin de semana, detectaron 36 conductores en infracción, de los cuales 18 fueron casos positivos de alcoholemia y uno de narcolemia.
Las intervenciones se hicieron entre el jueves a la noche y el domingo a la mañana por agentes del municipio y personal de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe, en las zonas de mayor concentración de la ciudad.
La secretaria de Control municipal, Carolina Labayru, detalló que los agentes controlaron documentación y elementos de seguridad. Además hicieron test de consumo de alcohol y sustancias prohibidas.
De acuerdo a datos oficiales, remitieron al corralón 36 vehículos de los cuales 18 eran conducidos por personas que, al ser sometidas a test de alcoholemia, dieron resultado positivo.
El registro más elevado medido fue de 1.91 gramos. También, obtuvieron un resultado positivo de cocaína y cannabis.
El resto de las remisiones fueron porque faltaba alguna documentación o elementos de seguridad vial.
“La conducción peligrosa de personas que consumieron alcohol u otra sustancia incompatible con la conducción es una falta gravísima que no vamos a tolerar como Estado municipal”, señaló Labayru.
“Un tránsito ordenado requiere de un control firme y permanente que garantizamos. Queremos una ciudad donde cada ciudadano y ciudadana pueda circular con libertad y seguridad y estamos trabajando para ello”, agregó la funcionaria.
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