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Sospechoso baleado tras robo

Por Ana Laura Piccolo. Un comisario patrullaba la zona de Rioja y Matienzo cuando vio un asalto. Quiso detener a los autores del hecho, que le dispararon y huyeron. Uno pudo escapar, y el otro recibió un disparo en el abdomen.

Cristian Ariel C. tiene 17 años, pero ya cargo con un extenso prontuario policial. Hace poco más de un mes se fugó del Irar y anteayer al mediodía mantuvo al trote por más de cinco cuadras a un comisario, con el que se enfrentó a los tiros luego de robarle la billetera a un peatón, en barrio Belgrano. En el enfrentamiento recibió un plomo en la zona abdominal, que lo dejó en estado reservado tras ser sometido a una cirugía.

Fuentes policiales informaron que pasado el mediodía de anteayer, el jefe de la seccional 14ª, Juan Pablo Bengochea, patrullaba la zona en su vehículo particular cuando escuchó por handy que en la esquina de Rioja y Matienzo se estaba cometiendo un ilícito. Pero al acercarse al lugar no encontró ni víctimas ni delincuentes aunque le llamó la atención la actitud de dos muchachos, cada uno a bordo de una motocicleta, por lo que jefe policial decidió dar una vuelta a la manzana. Al volver a pasar por el lugar, visualizó en vivo y en directo un robo calificado, cuando uno de los sospechosos descendió del rodado y apuntó con un arma de fuego a un peatón, quien automáticamente le entregó su billetera.

Según dijeron los voceros, el comisario –que vestía uniforme policial– descendió de su vehículo y le dio la voz de alto al muchacho, que lejos de rendirse gatilló su arma contra el policía y emprendió una fuga a pie. En tanto, su cómplice hizo lo propio a bordo del rodado y se perdió por las calles sin lograr ser identificado.

Ante la rebeldía del joven, el comisario Bengochea comenzó a perseguirlo a pie, en un trote que agitó tanto al menor como al uniformado, ya que la persecución duró varias cuadras. El pibe corrió por calle Zuviría hasta Camilo Aldao, dobló y siguió rumbo a avenida Eva Perón (ex Córdoba).

“Escuchamos disparos y después vimos que por calle Zuviría apareció corriendo un pibe con un arma en la mano. Me pegué un cagazo bárbaro”, dijo un hombre que presenció la corrida. “Atrás venía un policía también armado que ya no daba más y le repetía: «Tirá el arma, tirá el arma»”, continuó relatando el testigo. Al llegar a la avenida, el adolescente cruzó y tiró la billetera, para seguir la marcha hacia el norte por Camilo Aldao, mientras que el comisario se detuvo antes de cruzar Eva Perón.

Fue allí que lo auxilió un vehículo particular y le ofreció continuar la persecución sobre ruedas. De esa forma, el uniformado ganó la carrera y le cortó el  paso al menor, que según los voceros volvió a disparar. En esta segunda incursión a los tiros el joven fue alcanzado por un disparo que le atravesó el brazo y le perforó el abdomen. El muchacho fue trasladado en ambulancia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, donde lo sometieron a una cirugía y quedó en estado reservado.

El hecho es investigado por el juzgado de Instrucción de la 9ª Nominación, a cargo de Javier Beltramone y por la comisaría 12ª, que tiene jurisdicción en la zona donde el adolescente resultó baleado.

Fuga del Irar

El pasado 27 de junio, Cristian Ariel C. fue protagonista de una violenta evasión del Instituto de Recuperación del Adolescente Rosario (Irar), de Saavedra y Cullen, donde había sido encerrado tres días antes por orden del juzgado de Menores de la 1ª Nominación. Junto con otro menor y un arma blanca improvisada, Cristian amenazó a un acompañante terapéutico que le sirvió de escudo humano hasta alcanzar la puerta del lugar de encierro y logró escapar, suerte con la que no corrió su compañero, que fue apresado.

Estaba alojado en dicho lugar por una tentativa de robo a un repartidor cometida días antes en jurisdicción de la seccional 12ª, la misma en la que resultó herido anteayer. También en esa seccional estuvo preso su hermano, apodado Tierrita, quien permanece prófugo luego de la masiva fuga ocurrida a mediados de enero de este año.

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