País

El ataque fue el 4 de julio de 2016

Sobreseyeron a un comisario a casi seis años del ataque a Tiempo Argentino

La cooperativa Por Más Tiempo, que edita la publicación, denunció que una resolución judicial benefició al titular de la comisaría donde revistaban agentes que cooperaron con los atacantes


A menos de un mes de cumplirse seis años del violento ataque de un patota a las redacciones de Tiempo Argentino y Radio América, la cooperativa Por Más Tiempo denunció este sábado que “la justicia volvió a firmar un fallo de espaldas a las trabajadoras y los trabajadores”, del diario que recuperaron “después del vaciamiento del Grupo 23 perpetrado por los empresarios Sergio Szpolski y Matías Garfunkel”.

La cooperativa que edita desde 2016 la versión impresa y digital de Tiempo Argentino apuntó al juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, quien resolvió el sobreseimiento del comisario Jorge Azzolina, “actor central en la maniobra del 4 de julio de 2016 en la que una patota ingresó y destrozó la redacción”, según un comunicado dado a conocer por los trabajadores.

“Azzolina -consignan los periodistas de Tiempo Argentino- era el titular de la ex Comisaría 31ª de la Policía Federal, en la que cumplían tareas los policías que cooperaron con la patota la madrugada en la que intentaron impedir que el diario cooperativo siguiera en las calles y quisieron apropiarse de los equipos de transmisión de Radio América”.

El ataque ocurrido el 4 de julio de 2016, en el cual participaron una veintena de personas lideradas por el empresario Mariano Martínez Rojas, está considerado el peor ataque a medios de comunicación desde la recuperación democrática de 1983.

En aquella oportunidad ese grupo invadió las redacciones sitas en la calle Amenábar 23, en el barrio porteño de Colegiales, tras violentar accesos y tabicarlos, expulsaron con violencia a tres trabajadores que se hallaban dentro y se dispusieron a robar y destrozar equipamiento y documentación, con la intención además de impedir el alumbramiento de la cooperativa que sucedió al diario vaciado por Szpolski y Garfunkel.

Desde el momento del ataque, los trabajadores de Tiempo Argentino vienen reclamando que la Justicia determine cuál fue el rol de los efectivos, qué pasó durante esas horas previas y posteriores al ataque y cuál fue su vínculo con la patota.

“Como en muchos otros casos, el paso del tiempo se convirtió en un factor clave para eliminar evidencias, datos y documentos que den cuenta del accionar policial”, señalaron los integrantes de la cooperativa.

Y agregaron: Junto al Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBa) y la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI), repudiamos el fallo que desconoce el rol central que tuvo Azzolina esa madrugada y resuelve su sobreseimiento. También denunciamos la complicidad entre la Justicia y la Policía para mantener ocultos a los responsables por los delitos de ‘usurpación, daño, interrupción de un medio de comunicación’, como lo fue el episodio del 4 de julio de 2016″.

Comentarios