Edición Impresa

Situación crítica en Haití

La ONU reclama víveres para ser consumidos sin cocción y u$s 100 millones para poder subsistir 3 meses. Médicos Sin Fronteras prevé que lo peor está por venir por la cantidad de cadáveres y el riesgo sanitario.

En un marco de horror, siguen las tareas de rescate de sobrevivientes en la desvastada Puerto Príncipe.
En un marco de horror, siguen las tareas de rescate de sobrevivientes en la desvastada Puerto Príncipe.

El terremoto que el martes pasado diezmó a la capital haitiana ha dejado a unas 300.000 personas sin hogar y a dos millones sin alimentos, según la Organización de Naciones Unidas (ONU), que hace un primer balance de las gigantescas necesidades de un país en ruinas.

Ante la cantidad de gente que lo ha perdido todo, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) estima que de los nueve millones de habitantes de Haití, uno de los países más pobres del mundo, dos millones de personas necesitarán el mes que viene asistencia alimentaria urgente.

“La gente no puede cocinar, no tiene gas, no tiene necesariamente agua y no tiene dónde hacer de comer”, explicó la portavoz del PMA en Ginebra, Emilia Casella.

“Intentamos poner los víveres que tenemos a su disposición. Por el momento, lo que pudimos hacer no es más que una gota en el océano”, se lamentó.

La situación es tan dramática que algunos de los depósitos de la organización en la capital fueron saqueados, ante lo cual se prevé el envío de más víveres y de comida que no necesite ser cocinada.

Por eso le hacen falta —dice— 100 millones de dólares para tres meses.

Frente a la magnitud de los daños, Naciones Unidas dispuso ayer hacer un llamamiento de fondos en Nueva York. Una veintena de países, instituciones y empresas ya le prometieron 268,5 millones de dólares de ayuda financiera.

“Las necesidades son enormes”, reconoce la directora de información de la ONU en Ginebra, Corinne Momal-Vanian.

Aunque las agencias de la ONU se niegan a confirmar la cifra de 50.000 muertos adelantada por la Cruz Roja, consideran que 3,5 millones de personas sufrieron las sacudidas más intensas en Puerto Príncipe y sus alrededores, a unos 17 kilómetros del epicentro del temblor de tierra.

En tanto, la ONU intenta organizar sobre el terreno la asistencia humanitaria salvando los “enormes desafíos logísticos”, con un aeropuerto saturado, un puerto que no funciona y carreteras impracticables que dejan algunas zonas abandonadas a su suerte. Eso sin hablar de la falta de medios de transporte.

La prioridad sigue siendo “la búsqueda y el rescate de supervivientes” bloqueados bajo los escombros, explicó la portavoz de la ONG, Ocha en Ginebra, Elisabeth Byrs.

Por el momento la ONU no necesita, según ella, más equipos de rescate ni de hospitales móviles, sino de “equipos médicos, medicamentos”.

 El trabajo de Médicos Sin Fronteras

 En tanto, miles de personas heridas necesitan atención médica urgente y someterse a operaciones quirúrgicas, explicó el responsable de Médicos Sin Fronteras (MSF) en ese país caribeño, Stefano Zannini.

“Miles de personas tienen necesidad inmediata de intervenciones quirúrgicas y cuidados médicos”, afirmó Zannini durante una teleconferencia desde Puerto Príncipe, la capital haitiana.

La mayoría de los heridos sufren de fracturas, añadió el responsable, cuya organización espera la afluencia de más heridos.

“Lo peor está probablemente por venir”, estimó el responsable.   Zannini precisó que MSF había atendido “a más de 2.000 personas” desde el terremoto.

La ONG está instalada desde el jueves por la noche en el hospital de Chofcal, en el barrio de chabolas (villa miseria) de la Ciudad del Sol, en el norte de la capital, donde ya realizó operaciones quirúrgicas.

Una de las primeras intervenciones fue un “parto complicado que requirió una cesárea y que finalmente permitió salvar la vida de la madre y del bebé”, dijo.

MSF, tras dedicar horas a los problemas logísticos, está evaluando otras estructuras para instalar bloques operatorios, según la misma fuente.

La ONG, que necesita urgentemente antibióticos y equipos técnicos, utilizó el material existente y el recibido en un primer vuelo chárter, al que seguirán otros, anunció Zannini. Además 25 empleados internacionales de MSF llegaron en refuerzo y “otros llegarán durante los próximos días en función de las necesidades”.

La organización concentra sus esfuerzos en Puerto Príncipe.

Comentarios