Los trabajadores de la autopartistas Paraná Metal seguían ayer con su protesta sobre la autopista Rosario-Buenos Aires, que consta de cortes intermitentes cada 30 minutos en la conexión vial y en las colectoras. Los delegados gremiales aclararon que sólo resta acordar el tema salarial, porque los puestos laborales “ya no corren peligro”. En ese sentido, esperaban para hoy o mañana una nueva reunión con la empresa en el Ministerio de trabajo nacional, pero advirtieron que si no llegan a una solución para recomponer los sueldos, continuarán con los bloqueos que mantienen desde hace dos semanas e, incluso, que podrían incrementar las medidas de fuerza.
Los operarios de la metalúrgica de Villa Constitución habían rechazado en asamblea una propuesta acercada la noche del jueves pasado por los empresarios para que continúen 300 empleados cobrando el sueldo normal y otros 600 participen de un esquema de suspensiones rotativas con un sueldo mínimo que se completaría con subsidios del Estado.
El delegado gremial Alberto Churichi dio a entender ayer que los empleos en la empresa ya no corren peligro, y dijo que la protesta será levantada si se llega a un acuerdo de aumento salarial.
Churichi dijo que el conflicto con la gerencia de la fábrica, en manos del empresario cercano al kirchnerismo Cristóbal López, está trabado en la cuestión salarial, dado que la firma no acepta ceder ante los pedidos de mejoras.
“La discusión ahora es salarial. Los salarios están caídos. Hay que resolver ese tema porque lo otro ya está”, afirmó el sindicalista.
Los 900 trabajadores de Paraná Metal se oponen a irse de la ruta si la comisión interna que los representa no logra un acuerdo con López en el marco de las negociaciones que se están llevando a cabo en la cartera laboral que conduce Carlos Tomada.
Los operarios aseguraron que no sólo planean quedarse en la ruta, sino también endurecer las medidas de fuerza si un acuerdo no les asegura antes que no perderán sus empleos y que sus salarios serán recompuestos.
Churichi, por su parte, aseguró que en caso de acordar una mejora salarial “se levanta la protesta” y dio por cerrado el debate por la estabilidad de los 900 empleos en la planta de Villa Constitución.
El núcleo del bloqueo vial es el kilómetro 246 de la autopista, donde los operarios de Paraná Metal interrumpen el tránsito vehicular cada media hora y explican a los automovilistas las causas de la medida de fuerza.
La idea de la empresa es que 360 operarios sigan cobrando el sueldo normal y otros 600 cuenten con un “salario” más subsidio por un total de 1.850 pesos, según el comunicado de la firma Inversora MyS SA. En ese texto, la patronal destacó que, además, ofrece la continuidad en el cobro del salario familiar y la obrar social durante un año.
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