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Presentación

“Siento que este es el disco más nihilista de Salta la Banca”

Santiago Aysine habla de “¡Eureka!”, el sexto material discográfico de la agrupación que lidera como vocalista. El show tendrá lugar esta noche, a partir de las 22, en el Teatro Vorterix Rosario, de Salta y Cafferata.


Al grito de “¡Eureka!”, los Salta la Banca festejan el descubrimiento de su lugar musical, ese sonido en el que se sienten cómodos y que los representa en la actualidad: el rock es la base sobre la que se forjó el sexto material de estudio de esta banda que supo en sus comienzos ser un referente del llamado rock barrial pero que sorprendió con el eclecticismo de Visceral, su registro anterior, editado en 2013.

¡Eureka! es ahora un material homogéneo, contundente, guitarrero y, según describió el vocalista Santiago Aysine, “el disco más nihilista de Salta la Banca”. Será esta noche que sus doce canciones y un compendio de clásicos sonarán en Rosario, en una de las paradas del #EurekaTour, que comenzará a las 22, y tendrá lugar en el Teatro Vorterix Rosario de Salta y Cafferata.

“Cuando sacamos Visceral, ya tenía claro lo que quería hacer para el próximo disco. Estaba muy arrepentido de las fusiones que estaban en ese material”, confesó Aysine a El Ciudadano al tiempo que confirmó aquello que se percibe en ¡Eureka! a primera escucha: el rock fue una decisión a priori y de ella dependieron todas las subsiguientes, como fue la convocatoria de un productor para que los guíe; la elección de, nada más y nada menos, Alejandro Vázquez, quien trabajó con Luis Alberto Spinetta, Charly García, Carajo, Bersuit y Divididos, entre muchos otros, y es uno de los productores artísticos más codiciados del país.

“Fue todo un proceso trabajar con Vázquez porque se compromete con algo mucho más importante que la composición de un disco; lo hace con el grupo humano: entonces fue toda una experiencia. No es una persona que propone un sonido para el disco: él interviene sobre el mensaje, sobre la métrica, y lo hace desde el cimiento. Muchas de las canciones las terminé con él y con Ale Kurts (El Bordo). La aparición de Ale fue una sugerencia de Vázquez; le pareció un buen mediador entre la banda y sus ideas, y terminamos formando un grupo de trabajo increíble”, contó quien comparte la ascendente Salta la Banca con Alberto Grammatico (guitarra y coros), Santiago Maggi (teclado y acordeón), Gonzalo Sosa (bajo), Julián Baranchuk (batería), Mauro Ostinelli (saxo) y Ramiro Maidana (armónica).

“Visceral se llamó así porque su denominador común era, justamente, la tripa, el corazón”, rememoró Aysine mientras reconoció que esa “oscilación no funcionó”, y fue a partir de esa experiencia que decidieron como banda realizar un disco opuesto. “Es que para que un trabajo sea mas veraz, más verosímil, es necesario que sea súper homogéneo”, afirmó el músico reconociendo también haberse sentido influenciado por agrupaciones del indie rock como Kings of Leon, banda que tiene que escuchar “sí o sí una vez por día”, y que recomendó: “Me llamó mucho la atención desde la composición: todos sus instrumentistas son excelentes músicos pero componen y van generando distintos estados de ánimo permanentes sobre las canciones; trabajan los climas todo el tiempo: nunca está todo en primer plano, sino que aparecen en primer plano cuando tiene que explotar la canción. Me empezó a interesar esa parte de la composición”.

En compañía de Vázquez y Kurts fue que los temas de este nuevo disco fueron tomando forma; un equipo compositivo que trabajó, fundamentalmente, “para estar al servicio de la canción”, esas que en esta oportunidad abandonaron el espíritu más combativo, sello característico de Salta la Banca, para incorporar temas mucho más brillantes, canciones que hicieron de este el material más nihilista de la banda. “Si bien tiene varios puntos de oscuridad, Vázquez sugirió que había muchas otras cosas que decir. «¿Por qué no podés, así como sale tu parte oscura, mostrar tu lado luminoso? ¿Por qué no le mostrás a la gente cómo convertiste la mierda en todo esto?», me dijo Vásquez, y fue casi como un punto de partida; entonces la búsqueda fue también luminosa por momentos”, dijo el músico.

“Un montón de canciones de denuncia quedaron afuera del disco porque no llegamos a terminarlas; eso también tiene que ver con el espacio y el lugar que les dimos a las otras. Lo importante es que esas canciones siguen estando y seguramente saldrán más adelante. Hay algunos esbozos de denuncia. Nuestra posición siempre está clara, pero este disco no saca a relucir eso sino nuestra parte más nihilista. Es el disco más nihilista de Salta la Banca”, aseguró Aysine incorporando, para concluir, a otro de los grandes participantes de ¡Eureka!, Marcelo “Corvata” Corvalán, integrante de Carajo: “Más allá de su participación en «Chacal» y el tema que nos regaló («Quebrado»), fue un centinela del disco. Estuvo desde el primer día. Vino al estudio todos los días. Nos acompañó. Fue importante porque le dio al grupo una solidez importante y una seguridad para la toma de decisiones que fue clave”.

Un disco singular

“Todo cuerpo sumergido en un fluido experimenta un empuje vertical hacia arriba igual al peso del fluido desalojado”, indica el Principio de Arquímedes, inventor griego que, cuando realizó el descubrimiento que lleva su nombre, estaba sumergido en una bañadera y de la emoción gritó “¡Eureka!”, expresión que significa, para la Real Academia Española, hallar o descubrir algo que se busca con afán. De ahí parte el título del sexto disco de Salta la Banca, de encontrar ese lugar que se estaba buscando y de ahí parte también el arte de tapa que sorprende con un fondo negro de textura símil “gamuzada” y es recorrido por figuras de “agua”  que se entremezclan con un universo estrellado de fondo.

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