«Las cosas hay que tomarlas por quien viene. Él no tiene experiencia política y eso lo lleva a cometer ese tipo de errores, pero a esta altura sorprende poco y mucho menos con lo que está pasando y sin dar respuestas». Con esa frase Hugo Moyano se despachó contra Mauricio Macri, luego que el presidente cruzó a los sindicalistas que participaron de la multitudinaria marcha contra el Gobierno.
«Todo el mundo sabía que la situación que dejaba el gobierno anterior en la economía era compleja, con una trama social bastante complejo. Seguramente había que hacer algunas correcciones, pero es inaceptable que haga correcciones de forma inmediata para sectores que no tienen el problema de que le falte un plato de comida en la mesa y a los que dependen de un salario, que se ha visto carcomido por la inflación, no le den un solución», analizó el jefe de la CGT Azopardo en diálogo con el canal de noticias CN23.
En esa línea, Moyano ratificó la intención de lanzar un paro nacional en los próximos días. «No se ha evaluado la fecha, pero no se descarta nada. Cuando se vive una situación como se vive y no hay respuesta los plazos se acortan y las cosas se apresuran», dijo, y agregó que aunque no hay nada definido «una decisión de esa naturaleza debe ser tomada en conjunto» como la movilización del 29 de abril pasado.
«Todo lo que se pretenda ignorar o no escuchar de los trabajadores suena como una actitud de no tener en cuenta a un sector tan importante y no le cae bien a nadie. Espero que reflexione y tenga la grandeza de reconocer sus errores y que entienda que los reclamos son legítimos», como el aumento de emergencia para los jubilados, subrayó.
Por otra parte, el líder cegetista rechazó un eventual veto a la ley antidespidos que ya sancionó el Senado y próximamente deberá tratar Diputados. «Se tomarán las determinación que corresponde. Sería un error político muy grave, una actitud despreciable a los trabajadores que esperan una contención sobre los despidos en marcha. Sería una actitud muy grave del gobierno», enfatizó.
Moyano también rechazó la postura de los empresarios y el Gobierno de que esa norma atenta contra la creación de empleo. «Utilizan todos los argumentos para tratar de evitar tomar medidas que le den un peso más al trabajador para que pueda subsistir en una sociedad que no hay trabajo. Lo han hecho siempre, son las víctimas de la situación, pero se ven beneficiado cuando la economía funciona», expresó.
En declaraciones a radio Vorterix, el líder sindicalista confesó que no se siente «desilusionado por Macri porque no tenía ilusión» y aseguró que si «lo califican como gorila, algunos pelitos debe tener».
En otro tramo de la entrevista televisiva, dijo desconocer el contenido de la reunión entre el diputado Sergio Massa y el senador Miguel Ángel Pichetto. «Si es para llevar adelante el compromiso que tienen con los trabajadores, bienvenido sea. No creo que a esta altura dejan de lado ese compromiso», afirmó.
Asimismo, aseguró que Luis Barrionuevo no tuvo una «buena» actitud al faltar a último momento a la convocatoria sindical y multisectorial del viernes pasado. «Veníamos charlando, discutiendo, tratando de organizar la macha y después dejarla de lado no me pareció correcto, pero cada uno actúa a conciencia», sostuvo.
Moyano repudió los recientes dichos de Macri al visitar las obras del viaducto en Puente La Noria sobre la justificación de la quita de retenciones a la industria, el campo y la minería. «Son las medidas que el Gobierno se apresuró a tomar por los compromisos con los sectores de poder que tiene y se olvida de las necesidades que soporta la gente
Si esto continúa así demuestra que no tiene voluntad para dar respuesta a los que más lo necesitan», remarcó.
En el diálogo con CN23 negó que haya pedido una nueva audiencia con Macri. «Más allá de si se convoca o no a los dirigentes, esperamos que el gobierno tome las medidas», subrayó en la extensa charla con el canal de noticias.
Para el segundo semestre del año pronosticó una baja de la actividad y por ende, de los precios. «Ojalá que se pueda controlar la inflación. De acuerdo a las políticas que se llevan a adelante la inflación va a bajar por la desocupación, como en los 90. Perdimos todo el transporte internacional porque no podíamos competir con los brasileños y los chilenos. No creo que la forma de bajar la inflación es cerrando establecimientos y perdiendo puestos de trabajo porque la gente no puede comprar. Eso no es lo que la gente quiere. Debe ser controlada pero con el poder adquisitivo del salario», manifestó.
Por último, se refirió al regreso al regreso de Cristina de Kirchner a la escena pública. «No me convencía cuando estaba en el Gobierno por la forma despectiva y maltrato que tenía hacia alguna sector del movimiento obrero y tampoco me convence ahora. Las últimas presencia s no creo que puedan lidera algo, los que se han quedados son cada vez menos», dijo.
«El 25 de noviembre todos los ultrakirchneristas esperaron a hasta 23 para conocer el resultados y se pasaron a la otra vereda. Ella creyó que la iban a sostener y apoyar hasta último momento, pero desgraciadamente mucha gente estuvo cerca por conveniencia y no por convicción», concluyó.