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período 2010-2016

Según estudio de la Uca, en el Gran Rosario hay más pobres pero menos indigentes

"A diferencia de lo que ocurrió con el resto del país, Rosario y Gran Rosario experimentan una caída de los índices de la población en situación de indigencia, que va del 5,5 en 2010 a 4 por ciento en 2016", reveló Salvia, académico a cargo del estudio.


Telam-Rosario-17-03-2017.-El director del Observatorio de la deuda social de la Universidad Pontificia Católica Argentina, Agustín Selvia, brindó hoy una conferencia dónde dio a conocer los índices de pobreza e indigencia en el Gran Rosario entre los períodos 2010-2016.- foto JOse Granata

Según un informe del Observatorio de la Universidad Católica Argentina publicado este viernes, la indigencia bajó significativamente en el Gran Rosario entre 2010-2016, mientras que la pobreza aumentó levemente en el mismo período. El estudio, denominado “Barómetro de la Deuda Social, Pobreza y Desigualdad 2010-2016-“, busca “reconocer la problemática social que tiene la Argentina”, expresó Agustín Salvia, director del observatorio. Tanto planes sociales como el sostenido empleo informal de baja calidad –las changas– son factores que lograron reducir la indigencia, apuntó el académico.

“A diferencia de lo que ocurrió con el resto del país, Rosario y Gran Rosario experimentan una caída de los índices de la población en situación de indigencia, que va del 5,5 en 2010 a 4 por ciento en 2016”, reveló Salvia.

“Estamos hablando de unas 75 mil personas en situación de indigencia, una caída significativa”, añadió el investigador.

Respecto de los índices de pobreza para igual período, Salvia resaltó que, comparados con los índices nacionales (32,9 por ciento), en el Gran Rosario “es más baja”.

“Casi no hubo variación significativa de la pobreza de 20,6 en 2010 a 21,6 en 2016. Y lo que hay que destacar en este punto es que, en 2015, había llegado al 18% y en 2016 –un año– alcanzó el 21,6 por ciento”, precisó.

“En materia de números, estamos hablando de 313 mil pobres en el Gran Rosario”, añadió Salvia.

Sobre las causas de la caída de la indigencia, Salvia indicó: “El análisis demostró que las variaciones se deben a un fuerte componente de los planes sociales nacionales o provinciales, y otro componente fuerte es la informalidad. En Rosario detectamos que el empleo informal de más baja calidad –changas– se mantuvo, a diferencia de otras ciudades como en el Gran Buenos Aires”.

Para Salvia, los índices tanto de indigencia y pobreza están vinculados con la inflación.

“Una caída o baja de la inflación como lo que esta ocurriendo en estos últimos meses puede favorecer a una caída de la pobreza, aunque todavía no haya reactivación económica”, sostuvo.

“En cambio, es más difícil revertir la indigencia porque se sostiene en gran parte por los programas sociales, mientras estos aumenten en el mismo nivel que la inflación, no le ganan y para que ésta baje debe haber más trabajos informales o más trabajo para los informales”, completó.

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