El robo a mano armada a un minimarket de Sarmiento al 3100, cuyas imágenes fueron difundidas, motivó este sábado un operativo de Comando Radioeléctrico que culminó con la identificación del sospechoso, que vive en el Fonavi de barrio Latinoamérica y ahora posee orden de detención pero se encuentra prófugo. Además el personal policial secuestró el auto en que se movilizaba el asaltante: nada menos que un Alfa Romeo.
El viernes pasadas las 13 un asaltante irrumpió en el local de Sarmiento al 3100, de barrio Hospitales. Primero se hizo pasar como cliente pero luego mostró sus verdaderas intenciones. Mostró un arma de fuego y redujo a la empleada, Yanina.
En la desesperación, la chica agarró la plata que tenía en la caja y se la dio. Pero el asaltante al darse cuenta que no era mucho, dio la vuelta y se metió detrás del mostrador.
A esa altura, le seguía apuntando a Yanina con el arma y diciéndole que no grite, pero ella sólo atinó a gritar: “No me hagas nada”. Su padre y su hermano, que viven al lado, escucharon los gritos y corrieron al local. Pero el ladrón le dio un fuerte golpe con el arma a uno de ellos para poder escapar. Ezequiel recibió una herida en la cabeza producto del golpe y le dieron dos puntos de sutura.
Como el local cuenta con varias cámaras de seguridad que captaron la violenta secuencia, las imágenes no tardaron en llegar a los medios. Un dato fue crucial: el asaltante se movilizaba en un Alfa Romeo bordó de la década del 90, un vehículo no muy común en las calles rosarinas.
El dato de un sospechoso no tardó en llegar a los agentes policiales; un informante aportó que el auto se encontraba en inmediaciones de Brandazza al 2900, y que el asaltante se domiciliaba en Amenabar al 2500, señaló una fuente policial.
Este sábado por la mañana personal el Comando Radioeléctrico, previa consulta a la Fiscalía, allanó el domicilio y secuestró el Alfa Romeo; sin embargo el sospechoso aún se encontraba prófugo, pero identificado y con orden de captura. En el domicilio se incautaron de cuatro celulares, el DNI del sospechoso y una remera color gris, enumeró la fuente.
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