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Se hace camino al andar

La canciller colombiana, María Ángela Holguín, anunció ayer en Bogotá que el próximo 20 de agosto viajará a Caracas para reunirse con su par venezolano, Nicolás Maduro, y “ponerse a trabajar duro”.

El primer paso de un largo camino. La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, anunció ayer que el próximo 20 de agosto viajará a Caracas para reunirse con su par de Venezuela, Nicolás Maduro, tras la trascendente decisión de los presidentes de los dos países de restablecer las relaciones diplomáticas.

En efecto, Holguín indicó en rueda de prensa que en el encuentro con Maduro se buscará avanzar en el tema de la conformación de las comisiones que los presidentes Juan Manuel Santos y Hugo Chávez, de Colombia y Venezuela, respectivamente, acordaron durante la cumbre que sostuvieron anteayer en Santa Marta (norte colombiano).

En este sentido, los dos gobiernos acordaron la creación de cinco comisiones de trabajo: la primera de ellas y la más urgente, es implantar el pago de la deuda a los exportadores colombianos y el relanzamiento de las relaciones comerciales.

También habrá comisiones para trabajar un acuerdo de complementación económica; para el desarrollo de un plan de trabajo de inversión social en la zona de frontera; para el desarrollo conjunto de obras de infraestructura, y una sobre seguridad.

Holguín además ratificó la designación de José Fernando Bautista como nuevo embajador de Colombia en Caracas, algo que ya había anunciado Santos en la cumbre de Santa Marta.

En esta línea, la canciller señaló también que ayer se presentaron las credenciales al gobierno venezolano, y estimó que en un mes Bautista estará viajando a Caracas para asumir la embajada, que estaba a cargo de María Luisa Chiappe, quien fue llamada a consultas a Bogotá el pasado 21 de julio.

El anterior gobierno de Álvaro Uribe había decidido el llamado a consultas un día antes de denunciar ante la Organización de Estados Americanos (OEA) la presunta presencia de guerrilleros colombianos en Venezuela, lo que llevó de inmediato a la ruptura de relaciones diplomáticas por parte de Caracas.

En un contexto de moderada euforia, el secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner, afirmó a tono, tras la firma del acuerdo que restableció las relaciones entre Venezuela y Colombia, que el balance de la cumbre “es muy bueno” y aseguró: “Los latinoamericanos estamos maduros y demostramos que podemos resolver nuestros temas”.

El titular de la Unasur realizó un balance tras haberse logrado, en la reunión que duró más de tres horas, el restablecimiento de las relaciones entre los dos países y la firma de acuerdos para cooperación y recuperación del comercio y la integración social.

“Cuando se priorizan los objetivos, cuando se trabaja dejando de lado cualquier cuestión de juego mediático, en un tema tan delicado entre Colombia y Venezuela, el balance es muy bueno”, enfatizó.

En este sentido, Kirchner destacó que hubo “mucha madurez y reflexión por parte de los gobiernos” colombiano y venezolano, que acordaron actuar en forma conjunta para superar todos los inconvenientes.

Y agregó: “Hubo un muy buen comportamiento de los cancilleres y de los presidentes, hubo mucho cuidado de la privacidad, para no enturbiar algo que era muy difícil, porque el tema de la denuncia colombiana ante la OEA había dañado duramente la relación entre los dos países, y entonces todo eso dificultaba la situación”.

El ex presidente argentino definió a los dos presidentes como “muy racionales y responsables” y destacó el trabajo de los  cancilleres María Ángela Holguín, de Colombia, y Nicolás Maduro, de Venezuela.

“Logramos encuadrar la tarea, restablecer las relaciones bilaterales, armar una agenda en temas fundamentales y, por supuesto, en manos de los cancilleres queda ahora la elaboración de la hoja de ruta con la colaboración necesaria de la secretaría general de la Unasur para seguir vertebrando y consolidando el proceso”, afirmó a modo de síntesis de cara al futuro inmediato.

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