Un sargento del Ejército argentino, que amenazó con una granada al militante de la agrupación HIJOS y diputado provincial Eduardo Toniolli en noviembre de 2003 en Rosario, quedó a un paso del juicio oral por ese hecho, luego de que la fiscalía federal rechazara la solicitud de “probation” presentada por la defensa del acusado.
Se trata del sargento Fernando Conrado Carabajal, de 30 años, nacido en la provincia de Salta y quien prestaba servicios en el Departamento de Inteligencia del Segundo Cuerpo de Ejército en Rosario cuando en noviembre de 2003, amenazó con una granada a Toniolli, quien es querellante en causas por delitos de lesa humanidad.
“Nosotros, junto a los compañeros de HIJOS, entendemos que esto no puede terminar con un gesto de reparación tal cual propone la probation porque de esta manera estaríamos echando un manto de impunidad a un intento de amedrentar a testigos, que sentaría un nefasto precedente”, dijo Toniolli, quien desde diciembre de 2011 es diputado provincial por el Frente para la Victoria.
Toniolli reclamó que “se haga el juicio para conocer la trama de complicidades y además sentar un precedente para cualquier otra amenaza a testigos de delitos de lesa humanidad”.
El atentado ocurrió la madrugada del 6 de noviembre de 2003 cuando un desconocido arrojó una granada de fabricación militar contra el cristal del cybercafé “El Eternauta” de Rosario, propiedad de Toniolli, entonces querellante de la causa Quinta de Funes por delitos de lesa humanidad.
Según recordó el diputado, el atentado se convirtió “en el pico de una escalada de amenazas” que había sufrido en ese momento.
Un mes después, según el legislador, el juez de instrucción Osvaldo Barbero “ordenó la detención de un miembro activo del Servicio de Inteligencia del II Cuerpo de Ejército”, que se produjo en el Batallón de Comunicaciones 121 de Rosario durante un allanamiento realizado por las Tropas de Operaciones Especiales, un grupo de elite de la policía santafesina.
También, se allanó en esa oportunidad la sede del Segundo Cuerpo de Ejército, que entonces estaba radicada en Rosario y luego de trasladó a Curuzú Cuatiá, provincia de Corrientes.
Lucas Ciarniello, abogado de HIJOS y representante de Toniolli, los investigadores habían llegado al detenido por un testigo que identificó a una motocicleta la noche del atentado, a bordo de la cual huyeron quienes arrojaron la granada.
La defensa del sargento pidió ayer ante el Tribunal Oral Federal Nº2 de Rosario (TOF2) que se le concediera una probation para suspender el juicio por “amenazas coactivas”, dijeron a esta agencia fuentes judiciales.
“La fiscal (Adriana Sacone) se opuso y estuvo contundente con los argumentos, porque dijo que se trataba de amenazas a un querellante y testigo en causas por delitos de lesa humanidad e integrante de un organismo de derechos humanos”, contó Ciarniello.
Agregó que la fiscal también planteó que el tema “tiene que ser resuelto en un juicio de cara a la sociedad” y explicó que la probation supone “la suspensión del juicio y no significa aceptación de la culpabilidad”.
Tras la negativa de la fiscal Sacone al pedido de la defensa del integrante del Ejército, quien ahora cumple funciones en la localidad chubutense de Comodoro Rivadavia, el presidente del TOF2, Jorge Venegas Echagüe, debe resolver en las próximas semanas si acepta la solicitud de probation o eleva la causa a juicio oral.
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