Hace un mes el gobierno provincial había anunciado que la mortalidad infantil bajó por dos años consecutivos –de 2007 a 2009– para ubicarse en un 10,3 por mil respecto de los nacidos vivos. El ministro de Salud, Miguel Ángel Cappiello, y el gobernador Hermes Binner celebraron el dato como un logro de su gestión. Pero el último martes la Agrupación Santafesina Ramón Carrillo, que reúne a profesionales médicos vinculados al obeidismo, salió a desmentir los números difundidos por el Ejecutivo.
Según señalaron, la tasa es correcta como promedio, pero el gobierno “olvidó” aclarar que la brecha entre los departamentos más pobres de la provincia y los más ricos –en cuanto al índice de mortalidad infantil– se expandió en ese mismo período. El ministro de Salud rechazó las cifras difundidas por los médicos de la Agrupación Ramón Carrillo y opinó que se trata simplemente de una “operación con fines políticos”.
A mediados de octubre el Ministerio de Salud hizo pública la última estadística sobre el tema. Según ese informe, la tasa de mortalidad infantil pasó del 11,5 por mil nacidos vivos al 10,3 por mil entre 2007 y 2009: 1,2 punto en dos años. La directora de Maternidad e Infancia, Nora Redondo, habló de un descenso “para nada abrupto, pero significativo”. El proceso es gradual: en 2008 la tasa se ubicó en un 10,8 por mil. “Es un valor que viene descendiendo en los últimos tiempos en el territorio provincial”, indicó la funcionaria.
La mortalidad infantil se calcula a partir de la relación entre la cantidad de niños menores de un año fallecidos sobre mil nacidos vivos. Redondo aclaró en aquella ocasión: “Cuando se alcanzan valores cercanos al dígito es cada vez más difícil que la tasa descienda porque los factores que intervienen en las causas son más complicados para resolver, ya sea por cuestiones económicas o socioculturales, o por conductas y prácticas arraigadas tanto en la sociedad como en los servicios de salud”.
El pasado martes 9 la Agrupación Ramón Carrillo replicó ese informe y elogió las políticas aplicadas en los gobiernos de Jorge Obeid: “Fue en 1998, durante la gestión del ingeniero Obeid, cuando se registraron los mayores porcentajes de descenso de la tasa de mortalidad infantil. Eso le valió un reconocimiento al doctor Rubio Galli, quien se desempeñaba en ese momento como ministro de Salud de la provincia”.
Los médicos de la Ramón Carrillo debieron aclarar que no buscan sacar rédito de la polémica: “Nunca nos pareció atinado utilizar políticamente esta cuestión, tan sensible a la opinión pública, pero la actitud del Ejecutivo de manipular esta temática como propaganda, disfrazada de acto de gobierno, nos obliga una vez más a difundir ante la población la realidad de los índices en nuestra provincia”.
En su comunicado, la agrupación justicialista reconoce que la mortalidad infantil disminuyó en 2009, pero corrige la tasa: según ellos, se ubicó en un 10,5 por mil y no en 10,3 como había asegurado el Ejecutivo provincial. “Todavía está por encima del año 2006 –segundo gobierno de Obeid–, donde la provincia había alcanzado cifras de 10,4”, indicaron. Y agregaron: “Es improcedente hablar solamente de tasas generales y es imprescindible hablar de brechas, que marcan la inequidad de las oportunidades que la población tiene”.
El informe de la Agrupación Ramón Carrillo señala: “La medición de brechas en la mortalidad infantil muestra el impacto de las políticas de Estado para lograr que un niño que nace en un departamento pobre de nuestra provincia tenga la misma posibilidad de vivir que un niño de un departamento más rico. En Santa Fe, en el bienio 2002-2003, las brechas entre departamento era de 3,31 por ciento, mientras que en el bienio 2005-2006 disminuyó a 1,90 por ciento. En 2009 se registró un incremento de la brecha de 3,90 por ciento, ya que en el departamento San Justo (la tasa) fue de 20,3 por mil y en San Martín fue de 5,2 por mil”.
Los integrantes de la agrupación concluyeron que el gobierno de Binner difundió estadística incompleta con “una clara intención publicitaria”. Cappiello les salió al cruce: “No hay dos campanas, hay dos verdades diferentes. La Agrupación Ramón Carrillo da una tasa de mortalidad infantil que no es la real. En Santa Fe, en el año 2009, la tasa fue del 10,28 por mil. Esos son los datos oficiales que enviamos a la Nación”, indicó el ministro de Salud.
“Ellos dicen que mentimos, pero son ellos los que hacen un análisis político. Uno debe dar la información como corresponde; los datos que nosotros dimos son fidedignos y verdaderos. Salen de los distintos efectores de salud, los analizamos y los enviamos a la Nación”, agregó Cappiello. Según el funcionario, Santa Fe está entre las provincias con menor tasa de mortalidad infantil. La media nacional es del 12,3 por mil –dos puntos por encima de la media provincial–, en Tierra del Fuego es del 8 por mil y en el Chaco la tasa es del 20 por mil.
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