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Santa Fe: allanamiento en caso de herencia millonaria del Nobel de la Paz Carlos Saavedra Lamas

Los procedimientos, ordenados por la fiscal de delitos complejos del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Bárbara Ilera, se realizaron en jurisdicción de San Mariano, en Santo Tomé y en San Carlos


La justicia de Santa Fe realizó este martes una serie de allanamientos en el marco de una investigación penal, por posibles delitos cometidos en torno a una estancia que perteneció a Carlos Saavedra Lamas, Premio Nobel de la Paz en 1937, que su hijo donó a la Fundación Vida Silvestre, dijeron fuentes judiciales.

Los procedimientos, ordenados por la fiscal de delitos complejos del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Bárbara Ilera, se llevaron a cabo en la ciudad de Santa Fe, en jurisdicción de San Mariano, en Santo Tomé y en San Carlos.

“Los allanamientos solicitados por Ilera se enmarcan en una investigación por presuntas maniobras ilícitas cometidas a lo largo del tiempo relacionadas al establecimiento rural Estancia El Carmen, ubicada en San Mariano, la cual era propiedad de Carlos Roque Saavedra Lamas”, indicó el MPA a través de sus voceros.

La investigación se inició en julio de 2014 en la Unidad Fiscal de la ciudad de Esperanza y luego fue derivada a la Unidad Fiscal Especial de Delitos Complejos.

Otras fuentes dijeron que la fiscal investiga los presuntos delitos de usurpación, abigeato, estafas procesales y lavado de activos.

La estancia, de unas 2.700 hectáreas, fue propiedad del abogado y diplomático Carlos Saavedra Lamas, ganador del Premio Nobel de la Paz en 1937 por su plan antibélico que suscribieron 21 países mientras se desempeñaba como ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina.

Tras su muerte en 1959, su hijo Carlos Saavedra Sáenz Peña heredó la propiedad y al no tener descendencia dejó a su vez la estancia a la Fundación Vida Silvestre.

El conflicto se inició en 2014 cuando se intentó vender la propiedad y no fue posible debido a que un peón de campo de los Saavedra, identificado como Hugo Gómez, se presentó como dueño de la propiedad por usucapión, es decir que alegó tener derechos de dominio por haber residido allí como dueño durante más de 20 años.

Ante esa situación, la Fundación Vida Silvestre lo denunció por usurpación, en una causa en la que también está involucrada Claudia Olmos, esposa de Gómez.

La denuncia de la fundación incluye abigeato agravado, pues al momento de fallecer Saavedra la estancia tenía un plantel de más de 1.300 animales vacunos, y el arrendamiento ilegal de fracciones de la estancia.

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