Más cerca de lograr el acuerdo con los 36.000 empleados municipales que tiene la provincia (todavía falta ajustar el plazo de pago del aumento), intendentes y presidentes comunales siguen clamando para que los proyectos de emergencia salarial que se están tratando por estas horas en la Legislatura provincial –con pocas chances de llegar a un acuerdo, al menos por ahora– incluyan soluciones a la escasez de fondos que dicen soportar.
Con esa intención cerca de veinte intendentes de distintas fuerzas políticas se reunirá hoy a las 9 en la sede del sindicato de Luz y Fuerza de Rosario, donde brindarán una conferencia de prensa. Alejandro Ramos, intendente de Granadero Baigorria e impulsor de la reunión, dejó en claro que los intendentes avalan el porcentaje de incremento del 20 por ciento que se llevará a la reunión paritaria programada para mañana a las 11, pero al mismo tiempo quieren alertar sobre “la imposibilidad de pagarlo” en medio de la crítica situación presupuestaria que les toca soportar.
“La inmediatez entre la idea de la reunión y la concreción de la misma no nos permite confirmar asistencias, pero seguramente estarán presentes los intendentes de varias ciudades y comunas de la zona, representando a distintos sectores políticos”, dijo Ramos.
“Lo que nos une es encontrar un espacio de diálogo para lograr avanzar en la racionalidad política que se necesita entre el gobierno provincial y la oposición, abierto a los intendentes de todos los partidos, para que se pueda alcanzar consenso en un proyecto de fondo salarial que efectivamente nos contemple”.
“Hay que tener un reforma fiscal en todos los niveles”, le dijo a El Ciudadano el intendente de Villa Gobernador Gálvez, Jorge Murabito, en sintonía con lo planteado por Alejandro Ramos.
“Los legisladores tienen tiempos diferentes a los nuestros para debatir, rechazar y aceptar propuestas. De todas formas tendrán que ajustarse a nuestra necesidad urgente por esta situación que venimos padeciendo desde el año pasado”, advirtió Murabito.
Presupuestos para sueldos
“En Gálvez estamos con el presupuesto ajustado y el ochenta por ciento de los ingresos va al salario de los trabajadores municipales. Si no cobramos alguna deuda no podemos funcionar”, alertó el intendente de esa ciudad.
Ramos, por su parte, dijo tener comprometido el 90 por ciento de los recursos en concepto de pago de salarios de los municipales de Baigorria, “con una planta de 500 empleados, en una ciudad de 70 mil habitantes, donde además de pagar sueldos se necesitan obras y servicios”.
“Manifestamos desde un principio que tenemos un problema de financiamiento para poder hacer efectivo el aumento del veinte por ciento de los trabajadores. Estamos de acuerdo con el pedido, creemos que es justo, al igual que las medidas de fuerza, pero necesitamos una decisión política y ayuda de los legisladores y el gobierno”, dijo el intendente de Baigorria.
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