La Argentina se convirtió este mes en el tercer país de América del Sur en el que más porcentaje del salario mínimo promedio se destina al pago de tarifas de servicios públicos como gas, electricidad y agua.
Tras los ajustes en las boletas de electricidad, transporte y peajes en el primer trimestre, los argentinos ya destinan en promedio el 19% del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVN), actualmente en los 9.500 pesos.
Así, la Argentina quedó por detrás sólo de Venezuela, que ocupa la cima con 33%, y Chile, donde el pago de las tarifas de los servicio públicos básicos se lleva el 23% del salario mínimo de la economía.
El país desplazó este año a Brasil del cuarto lugar y a este ritmo pronto se quedará con el segundo lugar que detenta Chile, para ubicarse ya sólo atrás de Venezuela como el país con las tarifas más caras de la región.
Además, el peso de las tarifas en los sueldos chilenos viene en caída: en los últimos tres años perdió 3 puntos porcentuales de incidencia.
Atrás en el ranking regional vienen Ecuador, Colombia, Perú y Uruguay, según un estudio realizado por el Observatorio económico de la Universidad Nacional de Avellaneda relativo al costo de los servicios públicos. El peso de las tarifas de los servicios públicos en relación al salario mínimo aumentó 15 puntos porcentuales en los últimos tres años.
Según el informe, esta situación en la que se ve la Argentina se da después de que las tarifas de electricidad aumentaron 1.490% entre enero de 2016 y marzo de 2018; y las de gas natural por red se encarecieron 1.297% en el mismo período. Las tarifas de agua corriente subieron un 996% entre enero de 2016 y marzo de 2018, período en el que los peajes ajustaron 677%; el colectivo mostró un alza del 275%; y las cuotas de la medicina prepaga un 88%.