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Roig y el desafío Pre-Federal de Temperley: “Queremos competir en un nivel superior”

El entrenador del Negro confirmó la llegada de su hijo Álvaro, de Octavio Parizzia y de Mariano Lussenhoff, mientras que respaldó la idea de apostar a una base con pasado en la institución y sostener la continuidad de la competencia


Marcelo Roig en plena práctica con uno de los que retornó, su hijo Álvaro. Foto: Juanjo Cavalcante.

Temperley tiene un plan. La dirigencia del Negro y el entrenador Marcelo Roig confirmaron que jugarán el certamen Pre-Federal que nucleará a elencos de Santa Fe y Buenos Aires y que se pondrá en marcha en septiembre. Sin hacer locuras, apostando a caras conocidas del club de calle Ayacucho y con la idea de subir un escalón en la competencia, se lanzan a la aventura.

Tras su experiencia con León en la Liga Profesional de México, Roig retornó a Temperley y construyó una base para disputar el certamen local con varios jugadores que pasaron por las formativas del club. Ahora apunta a ahondar en esa tendencia, pero a la vez ir por un desafío superador para todos.

“Lo que el club quiere como primera opción es sostener la competencia. En todos estos meses sin jugar el club cumplió con los compromisos con entrenadores y jugadores, pero no quiere que le suceda más. Por eso resulta interesante un torneo que tiene autorización para jugar a nivel nacional, lo que va a asegurar la continuidad”, explico el experimentado entrenador, exitoso con las inferiores del Negro a nivel provincial con presencia nacional.

Pero ese no es el único objetivo que persigue el elenco de la Sexta, sino que también hay una búsqueda de identificación y pertenencia para con aquellos que supieron vestir la camiseta del Negro.

“Queremos competir en un nivel que, creemos, puede ser un paso arriba del que estamos. Y mirar que va a estar más cerca otro posible salto para el año que viene. Pero también queremos que vuelvan los chicos que pasaron por las divisiones menores del club, algo que en algunos casos estamos logrando y que en otros es más difícil”, explicó Roig, quien confirmó a su hijo Álvaro y a Octavio Parizzia como dos de los retornos, mientras que Fran López está entrenando en la institución, pero todavía no definió su futuro. El otro que llegó fue Mariano Lussenhoff, formado en Gimnasia.

Roig amplió el concepto y el anhelo que comparte con la dirigencia: “La idea es tener a corto o mediano plazo un equipo formado en su mayoría por jugadores que hayan pasado por alguna de las categorías formativas del club y la verdad es que ahora tampoco estamos muy lejos de eso, porque la mayoría del actual plantel jugó en formativas de Temperley”.

“El club pasó por muchas etapas y hoy está en condiciones de aceptar este desafío. Hay una estructura mejorada, con dormitorios en el club y se está terminando el gimnasio de pesas para los deportistas. Todo eso nos va a permitir mejorar el reclutamiento y los entrenamientos”, analizó el técnico, quien cree que es el momento de dar el paso: “Se juntaron todas estas cosas para poder dar el salto, la idea es buscar algún jugador más en algún puesto que necesitamos, pero lo vamos a afrontar con nuestra base, sabiendo que será mucho trabajo, pero no le escapamos a eso. Insisto en que los objetivos son mantenernos en competencia y apostar a jugadores con pasado en las formativas del club”.

Por último, Roig se mostró cauto a la hora de proyectar en cuando al plantel futuro, por lo que en cuanto a nombres sólo pone plazo a diciembre: “No pienso en la próxima Superliga, planificamos hasta diciembre y allí veremos, porque creo que el esfuerzo económico debe hacerse cuando se juega una competencia superadora. Por ejemplo, si tenés 100 no es lo mismo usarlo en 6 meses que en 12 y por eso es mejor apostar a un núcleo del club y reforzar para lo que sería una utópica participación en el Federal”,

Temperley tiene un plan, persigue una idea y Roig se pone al frente del desafío.

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