Germán Rivarola reaparecerá mañana ante Aldosivi. Lejos de estar conforme con el rendimiento mostrado hasta ahora, Pirulo promete mejorar. Aunque dejó en claro que el rol que ocupa hoy dentro del equipo, lateral por la izquierda, le exige un desgaste físico al que ya no estaba acostumbrado. Además, a entender de Pirulo, el canalla atraviesa el mejor momento futbolístico desde que juega en el torneo dela B Nacional.
—¿Es el mejor momento de Central desde que está enla B Nacional?
—Sí. Si tomás en cuenta la temporada pasada completa, seguro. Venimos de dos victorias consecutivas, estamos a tres puntos de los punteros… no hay dudas de que estamos en un momento bueno.
—¿En qué mejoró este equipo respecto del que jugó el torneo pasado?
—Veo que el grupo está muy bien. Venimos consiguiendo resultados…
—Desde afuera da la sensación de que es más difícil hacerle goles a este Central que al del torneo pasado.
—Si mirás las estadísticas creo que van a marcar ese aspecto. Nos hicieron muy pocos. No hay dudas de que esa es una clave. En el fútbol de hoy, el equipo que defiende bien es el que tiene mayores posibilidades de estar arriba en la tabla.
—Hablando de tus chances de volver ante Aldosivi, ¿cómo estás físicamente?
—Hice fútbol sin problemas y voy a estar entre los concentrados para el partido ante Aldosivi.
—¿Llegás diez puntos?
—Siento que sí. Lógico que lo ideal hubiera sido poder jugar sin problemas el partido pasado, ante Huracán. Pero calculo que voy a llegar sin ningún tipo de problemas para jugar ante Aldosivi.
—¿Te dijo Pizzi si vas a estar en el equipo titular ante los marplatenses?
—No, no, él nunca lo hace. Pero generalmente, cuando hacemos fútbol, el equipo que juega en la práctica es el que termina arrancando el fin de semana, Vamos a ver qué pasa. Todavía falta la práctica de pelota parada, que es la definitiva para saber quiénes van a jugar como titulares.
—¿Qué sensación te generan estos problemas físicos que padeciste durante el torneo que te impidieron jugar algunos partidos?
—Te da un poco de impotencia, de bronca, por no poder estar siempre dentro de la cancha, que es lo que uno quiere. Pero se sabe que esto forma parte del juego. No tengo más 22 años y el desgaste físico influye.
—De todos modos jugaste diez de los trece partidos que se llevan disputados en el torneo.
—Seguro. Depende como quiera ver uno el vaso. Haber jugado diez de trece partidos, es muy bueno para mí. El torneo pasado jugué mucho menos. Si mantengo este promedio, vamos bien (se ríe). Pero, hablando en serio. Lo más importante sería terminar este torneo jugando.
—¿Qué autocrítica hacés en lo personal?
—Uno sabe que puede dar más. Pero estoy jugando en una posición, y con una exigencia, que en el último tiempo no había tenido. Yo venía jugando en el mediocampo, incluso en el arranque de este torneo. Pero después me tuve que adaptar rápido a la otra posición, que exige un desgaste físico más importante. Siempre trato de dar lo mejor para el equipo, y espero ir levantando el nivel con el correr de los partidos.
—En esta readaptación al puesto, ¿lo que más te exige es el tema de pasar al ataque por sorpresa?
—Sí, puede ser. Tengo casi 33 años, y el físico no es el mismo que hace diez años. No podés pasar al ataque todos los tiros. Pero también tengo en claro que esto no es excusa para rendir a la altura de lo que me exijan.
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