El mediocampista Juan Román Riquelme, ya en libertad de acción, hizo retirar todas sus pertenencias del club, lo que pone un poco más de suspenso a su continuidad en Boca.
El volante envió a una persona de su confianza para llevarse los botines e indumentaria, habida cuenta que por el momento dejó de ser jugador del equipo auriazul.
Por estos días, Riquelme aguarda una definición, ya que pidió cuatro años para renovar, mientras que la dirigencia le ofreció tres.
En esa cuestión se trabó la negociación, y por eso el jugador ya dijo públicamente que empezará a escuchar ofertas de otros clubes del exterior.
En estos meses surgió el interés de Atlas de México, que es dirigido por Carlos Ischia, ex conductor de Boca, como así también de Flamengo de Brasil y West Ham de Inglaterrra.
Por su parte, el entrenador Claudio Borghi ya dejó entrever su deseo para que el jugador continúe en el club, y en caso contrario, pedirá la incorporación de un enganche.
En tanto, un grupo de simpatizantes colgó una bandera que decía “Te esperamos Román”, en uno de los alambrados del predio de Casa Amarilla, donde el plantel se entrenó.
Durante esa práctica, un equipo titular empató sin tantos ante un grupo de juveniles, que marcó la primera aparición del arquero Cristian Lucchetti y de los defensores Juan Manuel Insaurralde y Cristian Cellay.
Los titulares jugaron con Lucchetti; Muñoz, Cellay e Insaurralde; Marín, Méndez, Erbes, Monzón y Cañete; Mouche y Viatri.
Mañana, asimismo, los futbolistas volverán a entrenarse con miras al partido amistoso ante Palmeiras, que se jugará el 9 de julio en San Pablo.
Luego, el plantel se trasladará a Oceanía, donde jugará dos partidos en Australia y otro en Nueva Zelanda.
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