Fuente: Periódico Pausa
La empresa que ahora muchos se empeñan en mostrar como una suerte de modelo no sólo se abusó de sus contactos políticos durante la gestión de Cambiemos para dejarle al Banco Nación un muerto de 18.182 millones de pesos sino que además dejó deudas con entidades cooperativas por la friolera de $9.222.636.301,91, según consta en la nómina de acreedores quirografiarios del concurso preventivo de Vicentin. El monto es el 9,2% del rojo total de la empresa, de unos 99.345 millones de pesos. Para que se entienda: el presupuesto 2020 anual total –salarios, obras, el sueldo de los funcionarios– de la ciudad de Santa Fe es de 10.586 millones de pesos. La deuda con cooperativas de Vicentin no está muy lejos de esa cifra, la deuda total es nueve veces superior.
Las cooperativas más damnificadas fueron las agrícolas. El tendal alcanza a 97 entidades. Las mayores deudas son con gigantes del sector como la Asociación de Cooperativas Argentina (4.929 millones de pesos de deuda), la Unión Agrícola de Avellaneda (1.011 millones), la Cooperativa Agropecuaria Unión de Justiniano Posse (385 millones), la Cooperativa Agrícola Ganadera de Sunchales (103 millones) o la Cooperativa Agrícola Ganadera Guillermo Lehmann (91 millones). La deuda total con las cooperativas del campo llega a 7.762 millones de pesos. Afecta a 41 cooperativas de Santa Fe, 27 de Córdoba, 15 de Buenos Aires, ocho de Entre Ríos, cuatro de Chaco, una de La Pampa y una de Tucumán.
En segundo lugar, Vicentin dejó una deuda inmensa con la cooperativa Rabobank, de Países Bajos. Rabobank es un banco cooperativo internacional. Vicentin dejo ahí un muerto de 1.430 millones de pesos.
Por último, Vicentin dejó impagos con cooperativas de bienes y servicios de localidades en las que tiene un anclaje directo. Le debe $7.242.585,56 a la Cooperativa de Trabajo Portuarios, de Puerto General San Martín, $7.016.922,19 a la Cooperativa de Trabajo San Lorenzo, de San Lorenzo, y $15.781.285,56 a la Cooperativa de Servicios Públicos, Sociales y Vivienda de Avellaneda. Entre otros servicios, la última cooperativa es la proveedora de agua y luz en Avellaneda En Avellaneda está la sede de Vicentin. Esa deuda muestra que, mientras vaciaban el Banco Nación, vendían acciones de su planta más importante (Renova) a una multinacional y, además, facturaban exportaciones como nunca, ni siquiera pagaban el agua y la luz.
El listado completo del tendal que dejó Vicentin
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