La bandera de Ayohuma, utilizada por el ejército de Manuel Belgrano en la histórica batalla, esta en la etapa final de su restauración y se acordó no remover las manchas que presenta, que en principio se pensaba que eran de sangre, ya que su valor histórico “las convierten en evidencia del pasado del objeto y quizás, fuente de información futura”, informaron fuentes del gobierno de Jujuy.
Un equipo interdisciplinario se encuentra en la etapa final de restauración y puesta en valor de la bandera de Ayohuma, también conocida como Bandera de Estopiñán que perteneció al Ejército del Norte de Manuel Belgrano y que se encuentra en el Museo Histórico Provincial Juan Galo Lavalle de Jujuy.
La insignia es de color celeste y blanco, está confeccionada con la misma tela que las llamadas Banderas de Macha, que sirvió para identificar al ejército que dirigió Manuel Belgrano en el Alto Perú.
La Directora de Patrimonio de Jujuy, Valentina Millón, explicó que “se creía, presentaba manchas de sangre entre otras de diferentes características distribuidas en toda su superficie, aunque ello se terminó descartando”.
Añadió que “era pertinente su análisis por el componente ferroso que pudiera hallarse, que se oxida y deteriora las fibras textiles”.
En tanto, explicó que la presencia de sangre “hubiera sido de gran relevancia para la investigación histórica que también se lleva adelante en el marco de la puesta en valor de la pieza textil”.
En torno a la restauración, la especialista que encabeza el equipo, Patricia Lissa, comentó que “se realizó la corrección de deformaciones en el plano y la consolidación estructural mediante encapsulado entre dos telas, utilizando como soporte seda natural teñida al tono y tul transparente para permitir la correcta lectura de la pieza”.
Indicó que “se determinó que la restauración no contemple la remoción de las manchas, ya que el valor histórico de la pieza las convierte en evidencia del pasado del objeto y quizás, fuente de información futura”.
La bandera de Ayohuma, mide aproximadamente 2,32 metros de largo por 1,53 de alto y toma su nombre de la batalla de Ayohuma, donde Belgrano fue derrotado por las fuerzas realistas al mando del general Joaquín de la Pezuela en la provincia de Jujuy.
El pabellón que habría sido donada por la familia del comandante Estopiñan, forma parte del inventario del Museo Histórico Provincial Juan Galo Lavalle desde su creación, en el año 1942, cuya sede es una vieja casona de mediados del siglo XVIII, declarada Monumento Histórico Nacional.
Aunque más pequeña y fragmentada, está confeccionada con la misma tela, tafetán de seda, que las Banderas llamadas de Macha, actualmente expuestas una en el Museo Histórico Nacional de Buenos Aires y otra en el Museo Casa de la Libertad de Sucre Bolivia.
Las tres presentan igual hilado, ligamento y color pero diferente estado de conservación, tamaño y nivel de decoloración de las franjas.
El trabajo de restauración se impulsa en el marco de un proyecto de modernización e incorporación de tecnologías interactivas al Museo Histórico con el objetivo de reconstruir la historia de la bandera, a partir de la recopilación de datos orales, documentos y diarios del siglo pasado para corroborar su origen.
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