Regatas entendió cómo jugar la final y empató la serie como visitante ante Atlantic

La de Regatas y Atlantic pintaba para serie larga, y en la noche del viernes se aseguró la disputa de un cuarto partido tras la victoria por 73 a 70 del elenco de la ribera en calle Lavalle para recuperar la ventaja de localía y frenar el entusiasmo del Verde y su gente en un estadio explotado de emoción.

Para los memoriosos y los no tan, la comparación debe hacerse con las finales de ascenso de antaño, esos partidos discutidos en el mosaico, hablados, protestados adentros y afuera, en los que cada acercamiento al aro es casi una carnicería y en el que más allá de lo que suceda en los 36 minutos de juego, los últimos 4 van a ser apretados sí o sí casi por capricho del destino.

Si hasta los árbitros hacen retirar bombos, redoblantes y percusión de las tribunas, con las familias en cancha, en tensa cordialidad porque lo que importa son los colores del barrio.

Eso sí, para ser justos en la comparación, en este caso no hay mucho veterano en cancha (alguno sí) sino que los pibes copan la parada, los pisos son de madera y el partido va por streaming.

En la noche del viernes Regatas lució más preparado para la batalla, entendió que cada partido estará en los detalles y que cada centímetro ganado ayudará a ganar la carrera. De entrada le dio más juego a Garrofé y endureció atrás para que Atlantic no se sienta cómodo en ofensiva, porque cuando Gromico y García prenden, apagarlos es imposible.

Al local le costó horrores anotar, con un primer cuarto de terror (apenas un tiro de cancha convertido) pero lo bancó con el corazón de Zorrilla, Grieco y compañía. Un buen ingreso de Oggero ayudó a los visitantes a estirar la ventaja, y aunque López ayudó a Gromico a que Atlantic entre en juego, Regatas dominó marcador y juego ante un local que falló demasiado cerca del aro.

Pero en esta serie no habrá triunfo sencillo ni victoria holgada, y aunque Garrofé siguió anotando, en el local creció García, Zorrilla ganó rebotes y anotó y Gromico puso en partido al Verde, que mostró variantes defensivas que supieron aprovechar.

Se ilusionó Regatas con el robo de su pivot y posterior volcada para el 58 a 50 pero los pibes de Atlantic no se frustran, agachan la cabeza y van por todo. Llegó una bomba y una contra de García (9 en el cuarto final) para reaccionar y el partido se hizo palo y palo hasta el final con un apasionante duelo ante los dos jugadores diferentes de la serie y de la categoría (sacando a Provincial, claro). Gromico hizo 13 puntos en ese cierre y Carlachiani respondió con 12.

Un triple de D’Amato y un doble de Carlachiani abrieron una brecha que Atlantic no pudo descontar, falló desde la línea y no le quedó tiempo para cambiar la historia.

Está 1 a 1, sigue el domingo en Regatas. Y la verdad, va para largo.